Haz click aquí para copiar la URL
España España · Palma (Mallorca)
Voto de Miquel:
9
Musical. Comedia. Romance Antes de conocer a la aspirante a actriz Kathy Selden (Debbie Reynolds), el ídolo del cine mudo Don Lockwood (Gene Kelly) pensaba que lo tenía todo: fama, fortuna y éxito. Pero, cuando la conoce, se da cuenta de que ella es lo que realmente faltaba en su vida. Con el nacimiento del cine sonoro, Don quiere filmar musicales con Kathy, pero entre ambos se interpone la reina del cine mudo Lina Lamont (Jean Hagen). (FILMAFFINITY)
1 de mayo de 2009
32 de 36 usuarios han encontrado esta crítica útil
Film mítico, realizado por Gene Kelly y Stanley Donen. Escriben el guión Adolph Green y Betty Comden (“Un día en Nueva York”, 1949). Se rueda en Grauman’s Chinese Theater (Hollywood) y en MGM Studios (Culver City, L.A., CA), con un presupuesto de 2,54 M USD. Es nominado a dos Oscar (actriz reparto y banda sonora). Producido por Arthur Freed (“Un día en Nueva York”, 1949) para MGM, se proyecta por primera vez en público, en sesión de preestreno, el 27-III-1952 (NYC).

La acción dramática tiene lugar en Hollywood (L.A.), a partir de 1927. Durante el rodaje de la película muda “El caballero duelista” se estrena con gran éxito el film semisonoro “El cantor de jazz”. El productor R. F. Simpson (Mitchel) decide suspender el rodaje mudo y reconvertirlo a sonoro. El preestreno del film es un fracaso a causa de fallos de sonido, la voz ridícula de la protagonista Lina Lamont (Hagen) y unos diálogos muy malos. El productor R. F., el realizador y protagonista Don Lockwood (Kelly) y su amigo Cosmo Brown (O’Connor) deciden convertir el film en un musical. Con esta historia se cruza la del protagonista Don Lockwood desde sus inicios como cantante.

El film suma musical, comedia, romance y cine en el cine. Añade una descripción sucinta pero eficaz del nacimiento del cine sonoro y el impacto que éste produce en Hollywood. Es el segundo de tres musicales realizados para MGM por Gene Kelly (1912-96) y Stanley Donen (Carolina del Sur, 1924). Los otros dos musicales son “Un día en Nueva York” (1949) y “Siempre hace buen tiempo” (1955). Es el mejor de los tres y el paso del tiempo lo ha reconocido como un film mítico, junto a “Casablanca”, “Lo que el viento se llevó”, “El padrino” y otros. Algunos consideran que marca el punto culminante del género.

Recoge canciones del archivo de MGM compuestas por Nacio Herb Brown y Arthur Freed, como “Singin’ in the Rain”, creada para un espectáculo de revista e incorporada al film musical “The Hollywood Revue of 1929” (Reisner, 1929). Sólo una canción del repertorio se escribe para el film (“Moses Supposes”). El guión es original (no es la adaptación de una obra de Broadway), su texto es ingenioso y ágil, la historia central es interesante y oportuna, la dirección artística es inspirada, los números musicales, las canciones y el baile son magníficos, las interpretaciones son brillantes (incluida la de Debbie Reynolds, de 19 años, en su primer papel protagonista), el cromatismo es vibrante, el ritmo es vertiginoso, la precisión de los números de baile es prodigiosa, etc. Éstas y otras excelencias, junto a un admirable equilibrio del conjunto, convierten la visión de la obra en una experiencia estética superior. La suma de los factores relacionados se ve acompañada de un factor adicional: la magia cautivadora del film.

(Sigue en el “spoiler” sin desvelar partes del argumento)
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Miquel
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow