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España España · Puerto Real
Voto de TESS:
6
Terror. Thriller Londres, 1880. Una serie de asesinatos sacuden el ya de por sí peligroso distrito de Limehouse, y los vecinos están desesperados por los monstruosos crímenes cometidos por un asesino que se hace llamar el Golem. La policía, para no perder la popularidad del detective al mando, pone al experimentado detective Kildare al frente de la investigación. (FILMAFFINITY)
25 de abril de 2020
1 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Vaya sorpresa me he llevado con esta película de la que no sabía absolutamente nada. Me parece que es un trabajo muy interesante que nos deja muchas cosas positivas. Su director no es otro que el desconocido por mí Juan Carlos Medina, director nacido en Miami de padre español y madre francesa que decide trasladarnos al Londres de 1880 y, más concretamente, al degradado distrito de la ciudad llamado Limehouse, donde se están produciendo una serie de macabros asesinatos firmados por el Golem.

Medina nos regala una película muy correcta, excelentemente ambientada como es más que habitual en el gran cine británico, cine que es una de mis debilidades por la manera tan profesional de hacer cine y de meterte en la época que toca.

En ella tenemos al veterano Bill Nighy, actor que nunca me ha entusiasmando, haciéndose cargo de la investigación para Scotland Yard. Junto a él aparece la inglesa Oliva Cooke, a la que había descubierto unas semanas antes en su participación en "Ready Player One" y que está inmensa como Lizzie, un maravilloso Douglas Booth al que ya había visto en "Noé" junto a Russell Crowe y que entonces no me había llamado la atención. Aquí ha sido todo lo contrario, Booth es de lo mejorcito de la película y llena la pantalla cada vez que aparece con su inmejorable actuación.

Junto a estos tres protagonistas tenemos a la gran sorpresa de la película para mí, ni más ni menos que nuestra María Valverde en el papel de actriz de Music-Hall, envidiosa, celosa, encaprichada del marido del personaje de Olivam Cooke. La madrileña está inmensa, bella, con una dicción del inglés británico perfecta, sin problemas a la hora de mostrar su físico cuando lo requiere su personaje y sólo tengo palabras de admiración por el trabajo de María Valverde en esta película. De verdad que no entiendo a aquellos que la tachan de mala actriz a la que sólo contratan por su físico y por sus desnudos. No estoy para nada de acuerdo. Y como descubrimiento masculino tenemos al guapo australiano Sam Reid, muy correcto como el marido de Oliva Cooke.

La película no es la gran maravilla pero no está mal, entretiene.
Un saludo,
Tess
"La línea entre la comedia y la tragedia es una muy fina".
TESS
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