Haz click aquí para copiar la URL
Voto de Vivoleyendo:
4
Drama Tras un aterrizaje de emergencia en medio del campo gracias al cual salvan la vida un centenar de pasajeros, el comandante Whip Whitaker (Denzel Washington), que pilotaba el avión, es considerado un héroe nacional. Sin embargo, cuando se pone en marcha la investigación para determinar las causas de la avería, se averigua que el capitán tenía exceso de alcohol en la sangre. (FILMAFFINITY)
18 de enero de 2014
10 de 12 usuarios han encontrado esta crítica útil
Es una pregunta que me hago. Si nos paramos a pensar en la de veces que nos ponemos en manos de un extraño que conduce el autobús, el taxi o el tren, que capitanea el barco o que pilota el avión, en los que estamos tan acostumbrados a viajar que nos olvidamos de que una persona los dirige, se ponen los pelos de punta.
Porque no sabemos si ese profesional tiene sus facultades en una plenitud razonable, o si lleva cuarenta años con el cuerpo machacado de kilómetros y está deseando jubilarse de una bendita vez porque está más quemao que los palos de un churrero, pero con lo de retrasar la edad de jubilación están llenando las carreteras de conductores cansados.
Porque desconocemos si ha dormido lo suficiente la noche anterior, si ha tenido una bronca en casa y está alterado.
Porque ignoramos si ha bebido o se ha drogado poco antes de subirse al vehículo.
La siguiente pregunta que me hago es cómo es posible que se haya permitido ser piloto de avión de aerolínea y que además haya ejercido durante tantos años un tío que bebe como una esponja, esnifa cocaína como una aspiradora y que obviamente tiene que apestar a garrafón en veinte metros a la redonda, porque a alguien que bebe de esa manera se le huele el aliento desde bastante lejos.
¿Y me tengo que creer que incluso en los EEUU, donde por lo visto casi todo cristo empina el codo, y por lo tanto dan la imagen de que eso es algo normal, nadie se da cuenta nunca de que un borracho y yonqui empedernido transporta por aire a cientos o miles de almas a la semana?
¿O me tengo que creer que algunos se dan cuenta o ya lo saben pero no dicen nada, no denuncian, se quedan callados tan tranquilamente sabiendo que ponen sus vidas en manos de un irresponsable?
Porque el tío será un piloto cojonudo y nos regala en este film una de las escenas de aviación más acojonantes (junto con las de "United 93", "Náufrago" y "Viven") de la historia del cine, pero como ser humano es un capullo de mierda por ponerse trompa perdido justo antes y durante los viajes. Y nadie lo delata. No le pasan ningún control previo ni posterior y sólo lo pillan cuando tiene un accidente.
Le planto un 4 a la peli en lugar de un 1 o un 2 por esa apabullante escena mencionada y por el dilema que plantean. El accidente se produce por un fallo técnico y el piloto, drogado hasta las cachas, reacciona tan milagrosamente bien que se salva la gran mayoría. Él no es culpable del fallo del avión, podría haberle pasado a cualquiera porque hubo negligencias en el mantenimiento del aparato, e incluso se convierte en un héroe. Pero es culpable de otro tipo de negligencia. La misma que las estadísticas muestran sobre el escalofriante porcentaje de conductores ebrios que matan y lesionan de por vida a gente por esa causa. Ah, que el prota también conduce borracho, qué casualidad.
Que a un tío así se le concedieran dos licencias, la de pilotaje y la de conducción, y durante a saber cuánto tiempo ha estado haciendo el mamarracho con tanta gente a su cargo, dice mucho sobre cómo funciona el sistema. No sé si eso es algo muy habitual allí ni si Zemeckis está vertiendo una crítica brutal, o si la ha cagado porque a ver quién se cree lo de este tipo. Pero a mí me parece esto último porque parece que pretende que nos dé mucha pena su mierdoso protagonista al que se le llega a coger verdadero asco cuanto más avanza el metraje.
Y otro detalle bastante pesadito. Yo no sé si Zemeckis es muy religioso o no o si le ha dado la vena recientemente, pero tanto meter a Dios hasta en la sopa chirría. Me recuerda a la peli "San Francisco". Hay una catástrofe y venga a darnos sermones. ¿Es que si somos buenos iremos al cielo en los aviones celestiales? Parece como si por fuerza Zemeckis nos tuviera que convencer a los no creyentes y a los agnósticos. Yo no trato de convencerle a él de que Dios no existe, que crea lo que quiera, mira tú.
Lo de este alcohólico crónico no se cura por intervención divina, de eso estoy segura.
Me lo pensaré mucho si alguna vez voy a Estados Unidos y me monto en aviones pilotados por estadounidenses, gracias a Zemeckis. Total, allí es normal que todo el mundo se ponga hasta el culo y que se convierta en héroe nacional un capullo que si le arrimas una cerilla encendida arde por combustión espontánea.
Vamos, que sólo falta que nos lancen un mensaje como: "Sé yo más estando trompa que cien sobrios".
Vivoleyendo
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow