Vi esta película porque me daba curiosidad ver a Mr. Bean haciendo un papel serio.
Esta "comedia", aunque esté clasificada como tal, no es una comedia ni mucho menos. Es un thriller dramático con algún que otro momento cómico, pero nada más.
Aquí, nuestro querido Rowan Atkinson hace uno de los únicos papeles serios de su vida. De hecho, es un poco incongruente que el reverendo más soso y cortito de toda la historia cinematográfica sea interpretado por el mismísimo Bean, que le resta credibilidad al personaje, y que da la sensación de que en cualquier momento va a poner muecas raras y a tropezarse con las piedras del pueblo. Hace una buena interpretación (si lo que se pretendía era que no fuera gracioso), pero lo suyo es la comedia, y se ve de lejos. Además de que esté escrita en el guión la frase de "Estoy harta de verle con esa cara de no haber roto un plato. Le arrancaría los huevos" de Kristin Scott Thomas.
Por otro lado, Maggie Smith, a diferencia de su incomparable McGonagall, es una ancianita risueña y amable (con la gente a la que quiere, claro).
Y por último, tenemos a Kristin Scott Thomas y Patrick Swayze que siguen en su linea, como siempre.
La interpretación de los niños (especialmente los matones) poco creíble. Se deberían currar un poco esa parte.
Muy bueno el argumento, la fotografía y lo demás normalito.