Evil reflexiona como muchas otras películas sobre el principio de la maldad humana. ¿Se nace con ella, surge a base de las vivencias, existe el mal en estado puro? Al menos es el planteamiento inicial y la pregunta sale a reflote durante varias ocasiones en el visionado pero pronto pasa a ser una película sobre el acoso en un centro de estudios (en esta ocasión un internado), el dolor y el sufrimiento que es capaz de soportar alguien y un ejercicio de paciancia llevada al límite que haría levantarse de su tumba y aplaudir al mismo Job.

Erik sufre en silencio las palizas a base de correazos de su padrastro, las cuales pueden llegar por cualquier motivo como una simple mirada en la mesa o que se caiga sin querer el tenedor al suelo. Su adorada madre, por la cual seguramente no reaccione, toca el piano para no escuchar cada golpe. Este canaliza esa rabia en algún acto vandálico y sobretodo en actos de violencia en la escuela. Es expulsado y su última oportunidad reside en un internado al que es enviado. No puede fallar a su madre y así se lo promete.

Personalmente y desconociendo la sinopsis, pensaba que iba a instaurar allí un reino de terror y manejar el cotarro del internado, desfogando esa violencia y odio que lleva dentro, pero es justo al contrario. Los del último curso son los que dominan todo el centro, por encima de incluso los profesiores y tienen instaurado un regimen de obediencia, humillaciones y castigos con los que las novatadas de las universades americanas en comparación, son una broma. Empieza como un villano, le dicen que es el mal encarnado y pronto vemos que lleva un justiciero dentro que opondrá toda resistencia a esa tiranía del centro.

Como digo, el protagonista tiene que mezclar ingenio y sobretodo paciencia porque los del último año pueden hacer practicamente lo que quieran, sorteando incluso la legalidad, cuando él casi todo lo que haga y sobretodo agredirles que es lo que más ganas tiene, le puede costar la expulsión y con ello romper la promesa que le había hecho a su madre. Lo intentarán no solo con él sino con los que le rodean, teniendo una lucha de poder constante que contagia al espectador la desesperación de la situación que se está viviendo.

Recomendable y dura cinta con buenas actuaciones, interesantes reflexiones y una resolución para mi diferente a lo que esperaba pero acertada y que no molesta, en un relato con el que uno puede empatizar facilmente y hacer una introspección o análisis de la violencia de cada uno.

Nota: 7'3

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