Para empezar vamos a olvidarnos de que esta es una película seria sobre el espacio acerca de un hombre que queda abandonado a su suerte en Marte y tiene que sobrevivir sólo en un lugar inhóspito sin saber si podrán rescatarlo, ni siquiera sin saber si saben si sigue vivo. Todo esto con el conflicto psicológico que eso debe suponer, porque esta es una película de aventuras en el espacio acerca de un hombre que se queda abandonado en Marte y que como si de un Robinson Crusoe espacial se tratara consigue no sólo sobrevivir gracias a sus conocimientos de botánica, aparte de otros conocimientos y de que ese Marte es como el garaje donde encerraban siempre al Equipo A ¡Allí hay de todo para que vaya saliendo del paso!. Naturalmente del conflicto psicológico del personaje principal nos olvidamos pues él en Marte se lo pasa pipa escuchando música discotequera de los años 70 aunque esta no le guste. Es más, estoy seguro que el tío se encontraría más perdido en Albacete de lo que realmente se encontraba en Marte. Bueno, pues si olvidamos el primer punto y tenemos en cuenta el segundo la película resulta un entretenimiento muy divertido y que se pasa volando.

Matt Damon es el astronauta perdido. Entre perderse en la II guerra mundial o perder la memoria en las pelis de Bourne parece que se especializo en este tipo de personajes o que lo encasillaron, por lo tanto está todo lo creíble que su situación requiere.

No se hasta que punto las teorías que lanzan y ponen es práctica son posibles pero supongo que aunque sea una peli de aventuras no soltarán teorías al azar, aunque estas sean incapaces de ponerse en práctica tal como se ven en la película, y que serán más o menos cierta.

También tiene algunos excesos patrioteros y algunos chistes muy malos y muy previsibles.

Aparte de Jessica Chastain, Kate Mara, Chiwetel Ejiofor, Kristen Wiig o Jeff Daniels que forman parte del equipo de rescate y los que dirigen la operación, también sale Sean Bean como parte de ese equipo y que, contra todo pronóstico, no se muere al final.