El invisible Harvey

Adaptación de una comedia teatral de Mary Chase que ofrece un encantador relato fantástico con diferentes vertientes. Una que sitúa la trama en un elogio a la imaginación como evasión del mundo real, otra como simbólico cuento sobre la libertad de elección y de conducta en pos de conseguir la felicidad existencial con vínculos no materiales, y por supuesto también puede ser interpretada simplemente como una divertida comedia sin más pretensiones que centrar su mecanismo humorístico en el comportamiento de un afable y fabulador alcohólico.

En cualquiera de tales vertientes se trata de una notoria película con un extraordinario James Stewart. A su lado brilla la maravillosa Josephine Hull, una de las venerables tías de Cary Grant en "Arsénico Por Compasión" (1944), que aquí encarna a la hermana de Stewart.

Una película de las que traen la nostalgia de los mejores momentos de la infancia. Un guión inteligente mezclado con fantasía hace de esta película una divertida comédia absurda. James Stewart interpreta a un adulto que prefiere ser "Oh muy amable" para llevar mejor las desgracias de la vida. Sin duda alguna, una película que hay que ver, que pone en duda quienes son los que están locos y quienes los que estan cuerdos.

Es una película amable y divertida, de las de humor blanco. No le pido mucho más a una comedia. No creo que haya tanta crítica a la psiquiatría, una ciencia muy respetable, por otro lado. De hecho, el personal del hospital se muestra bastante humano con el protagonista, pese a la reticencia inicial. No así el celador o la policía, un poco estereotípicos.
Personalmente, me ha servido para recordarme a mí mismo que hay más de una realidad, quizás tantas como personas en el mundo.