Rubicon (Serie de TV)

Mi objetivo con esta breve reseña no es analizar la serie en sí misma, sino aportar al lector un granito de arena, un empujoncito para que se anime a verla. Eso sí, sin pretensiones ni prejuicios ni expectativas. Para ello es indispensable que de base aceptes o te veas atraido por lo expuesto en la sinopsis.

Algunos dicen que es lenta. A mí no me lo pareció. Ni un capítulo de relleno, si acaso alguno de transición.

Son 13 capítulos, tienes muy poco que perder y, como digo en el título, vale la pena porque has perdido tu valioso tiempo muchas veces en cosas muuuuuucho peores.

De lo que se puede esperar de esta serie no voy a decir nada más de lo que ya se ha dicho en el resto de críticas: es lenta y cuesta engancharse. Este es su mayor lastre y lo que ha provocado que cancelasen la segunda temporada por sus bajos indices de audiencia. Por lo tanto, quien vea esta serie, y aguante hasta el final, se le quedará cara de tonto al ver el último capitulo donde dejan la trama abierta para una segunda temporada que nunca llegará!
Eso sin contar que el último capitulo es penoso y, en mi opinión, estropea la serie.
Por otro lado, el protagonista no me convence, se supone que es un tío muy inteligente, muy por encima de la media, y espabilado. Pero hay momentos de la serie que sus acciones te hacen dudar de esto.

No soy muy aficionado a ver series, sobre todo por la longitud de las mismas y porque generalmente su único objetivo es aguantar en antena el mayor tiempo posible, al precio que sea. Por eso me decidí a ver esta serie "fracasada" que consta de "sólo" una temporada de 13 capítulos, después de la insistencia de un amigo. Realmente no me ha decepcionado, sino al revés; me ha proporcionado un placer casi similar al de visionar una saga como la de "El Padrino". Y es que lo primero que llama la atención es la belleza de los encuadres y el cuidado puesto en el tratamiento de la luz, tanto en interiores como en los pocos exteriores. Luego está el trabajo de los actores, comedidos y eficaces, y un trabajo de guión que pone la guinda. Existe un argumento, desarrollado a través de los capítulos en un continuum que va alcanzando cotas más altas de tensión a través de un suave in crescendo. En ese sentido, la serie funciona como una película larga, con lo que da más tiempo para caracterizar a los personajes y graduar la acción. El tema es el terrorismo internacional y los protagonistas son "analistas" de una agencia de inteligencia americana. Por debajo de la intención de entretener, con los descubrimientos y escarceos amorosos de los personajes, late la inquietante sospecha de que el "parecido con la realidad" pueda ser algo más que una mera casualidad.

Inteligente serie, sin los alardes de estirar la acción hasta límites casi inverosímiles que tanto se llevan en las actuales series televisivas de suspense política, "Rubicón" se muestra poco a poco como una colección de letras donde colocar los puntos que unen las casillas de su casi magistral puesta en escena. Personajes gélidos y suspense que queda congelado en cada capítulo para, al final, mostrar una catarata de emoción que termina por rellenar su pasatiempo encadenado. Igual su lentitud se hace pesada al principio, pero poco a poco, si uno se mete en la trama, termina por engancharse a su estupendo guión.

Me ha parecido una excelente serie, incluso daba para continuarla, buena labor del analista de inteligencia interpretado por James Badge Dale- el mismo secundario de los INFILTRADOS- Nada es lo que parece, otros buenos actores, buena fotografía. Recomendable.Ya desde el inicio de muestra el suspenso, con la muerte de un protagonista principal, con telón de fondo la nieve y su bella esposa interpretada por la siempre estupenda Miranda Richardson.