Eternals es sin duda, otro paso adelante para Marvel Studios.

Los personajes llamados "Eternos" fueron creados por Jack Kirby hace décadas, con la idea de introducir Dioses en los comics. Son extremadamente difíciles de adaptar al cine, ya que existe una notable complejidad en las viñetas de las que proceden.
Sin embargo, Chloé Zhao, conocida por su reciente Óscar por "Nomadland" ha conseguido lo que parecía imposible, hacer una película de estos seres celestiales y no morir en el intento.

La historia es contada alternando flashbacks y el tiempo actual, lo que le confiere un gran dinamismo.
Los poderes de cada Eterno quedan perfectamente claros desde las primeras escenas y las luchas no son nada confusas (algo difícil en una época donde es frecuente ver combates borrosos y donde se hace mal uso de la cámara).

Los personajes presentan una entidad propia, destacando a Sersi, Ajax, Ikaris y Thena como los que sobresalen tanto por la actuación de los actores y las actrices como por su repercusión a nivel de trama.
Los romances o (casi) relaciones sentimentales que se establecen entre varios de los protagonistas potencian aún más el significado de las escenas y dotan de un nivel de drama necesario al relato.

El punto negativo viene dado por el desconocimiento de los Eternos hasta esta película, lo que hace difícil empatizar con ellos en ciertos momentos del film.

En definitiva, en líneas generales, son 137 minutos que se pasan volando y dejan ver que no todo tiene por qué ser Vengadores. LARGA VIDA A MARVEL!