Los hermanos Farrelly se caracterizan por realizar películas cómicas de gran aceptación de público. Además, cuentan entre su filmografía con comedias efectivas que convencen y de gran éxito como "Dos tontos muy tontos", "Algo pasa con Mary" o "Amor ciego".
Así que tenía ganas de ver este film que cuenta con un gran número de actores importantes que se unen al proyecto, para aportar su granito de arena y conseguir el éxito. El problema es que el éxito no existe. Es más, ni se atisba a millones de kilómetros.
La película es tan bochornosa, produce tanta vergüenza el verla; que sinceramente es de lo peor que he podido ver en mi vida. La estuve viendo en un tren, y no podía dejar de mirar a mi lado, para comprobar si la gente me miraba y se sorprendía con las imágenes que se proyectaban en mi portátil.
No hay por donde coger esta trama que sin lugar a dudas es una auténtica tomadura de pelo. No sé como se les pudo ocurrir semejante desfachatez de idea, pero lo cierto es que es tan degradante hacia el espectador el ver esta historia de hora y medía; que sinceramente a los hermanos Farrelly se les debería prohibir dirigir durante al menos siete años.
La película se basa en una sucesión de escenas de humor absurdo que no hacen para nada gracia, y que por supuesto únicamente producen rabia y malestar al comprobar que uno está desperdiciando hora y media de su vida en semejante chorrada.
Con respecto a las actuaciones, pues poco que decir. Ni un solo actor consigue convencer (y eso que hay algunos buenos actores). Pero la verdad es que es muy complicado que con semejante material se pueda sacar un buen trabajo actoral. Todos ellos están totalmente sobreactuados y no resultan para nada creíbles. Sus trabajos son tan histriónicos, que no producen ninguna gracia y lo único que se plantea uno en la cabeza es la reflexión de: "¿porqué hacen esto?"
En fin, "Los tres chiflados" es sin lugar a dudas una de las peores películas que se ha podido hacer en la historia del cine. Es un auténtico insulto hacia la figura del espectador, ya que los directores lo tratan como si fuera un auténtico imbécil. Un film para no ver jamás, y para quien lo haya visto para ir al psicólogo e intentar borrarlo de la memoria.