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Dominican Rep.
Killer_Wolf rating:
13,375
Drama
Gelsomina is sold by her very poor mother to Zampanò, an itinerant strongman. She follows him on the road ("la strada") and helps him during his shows. Zampanò ill-treats her. She meets "The Fool", a funambulist. She feels like going with him, but he puts confusion in her mind by pointing out that perhaps Zampanò is in fact in love with her ...
Language of the review:
- es
August 18, 2010
4 of 12 users found this review helpful
Notable película de Enrique Castro Quini donde vuelve a reivindicarse como uno de los actores malditos y mas infravalorados del planeta.
Nuestro pichichi, absolutamente desatado, noquea con su presencia y devasta con su mirada, el poderío de Quini aquí es una auténtica barbaridad.
La Posada es buena, no cabe duda, aunque no acabo de ver esa monstruosidad que algunos proclaman, veo que falta historia, tras un inicio atronador, Felación decide ejercer de minero y explora los sentimientos humanos y todo lo que conlleva, ahí, Felación, con su recortada revienta pechos, pero en cuanto a historia, jajejijoju.
Son de agredecer también lo guiños al genio Chaplin por parte de Gelsomina, a la cual por otra parte, y en bastantes momentos, dan ganas de abofetear.
Sensibilidad, amor hiriente y no manifestado están perfectamente recreados en La Posada y por encima de todo, por encima de la ley, emerge Quini como un auténtico huracán, con sus doblones, con su crisma, reventando cadenas del w.c. con el pecho, doblegando a la multitud.
Qué grande Quini, qué gran pichichi.
Se despide desde La Posada.
E.P.M.
Andrés Jiménez.
Nuestro pichichi, absolutamente desatado, noquea con su presencia y devasta con su mirada, el poderío de Quini aquí es una auténtica barbaridad.
La Posada es buena, no cabe duda, aunque no acabo de ver esa monstruosidad que algunos proclaman, veo que falta historia, tras un inicio atronador, Felación decide ejercer de minero y explora los sentimientos humanos y todo lo que conlleva, ahí, Felación, con su recortada revienta pechos, pero en cuanto a historia, jajejijoju.
Son de agredecer también lo guiños al genio Chaplin por parte de Gelsomina, a la cual por otra parte, y en bastantes momentos, dan ganas de abofetear.
Sensibilidad, amor hiriente y no manifestado están perfectamente recreados en La Posada y por encima de todo, por encima de la ley, emerge Quini como un auténtico huracán, con sus doblones, con su crisma, reventando cadenas del w.c. con el pecho, doblegando a la multitud.
Qué grande Quini, qué gran pichichi.
Se despide desde La Posada.
E.P.M.
Andrés Jiménez.
