Deslumbrados por la novedad del Cinemascope, la Fox produjo éste floja cinta que no tiene ningún atractivo en los tiempos actuales. Tuvo un gran impacto en las salas comerciales en aquellos años de su estreno por el gran atractivo del nuevo sistema enriquecido con el sonido estereofónico magnético de cuatro pistas, que hacía más novedoso y deslumbrante ir al cine y sentir los efectos visuales y sonoros del nuevo sistema cinematográfico que marcó una época y que hoy día más perfeccionado es utilizado en la mayoría de las producciones.
Aún con la presencia de Richard Widmark, que hace lo que puede en un pobre guión, y con un reparto poco atractivo no merece perder el tiempo ni para distraerse el contemplar esta película.

José Antonio ZG