No es "Onward" la mejor película de animación que ha salido de la factoría Disney + Pixar, aunque tampoco es la peor. El principal problema (y quizás ventaja) de "Onward" es que parece diferente a todo cuanto hemos visto antes en la animación, en términos de historia y de profundidad. "Onward" transita por caminos nuevos, lo hace de forma casi inapropiada para el cine de animación y, finalmente, consigue volver a conectar con el desconcertado espectador. "Onward" es una película oscura (tanto en la forma como en el fondo), incluso es descorazonadora, en vez de conectar con el espectador mediante aquellos parámetros emocionales que ya sabemos que funcionan con este tipo de cine, explora nuevas posibilidades (y no todas son optimistas). El mundo de "Onward" no es todo lo bonito que esperaríamos de una película sobre magia y redención, pero funciona. En determinados momentos "Onward" parece una copia/parodia de "Indiana Jones y la última cruzada" de la que copia (literalmente) dos escenas, además de varios momentos propios de la saga de Indiana Jones, quizás esto sea una falta de imaginación o quizás sea un bonito homenaje. Y aquí radica el problema: toda la originalidad y la novedad que propone "Onward" queda ahogada con escenas calcadas de las sagas de Harry Potter, El señor de los Anillos o Indiana Jones. Y cuando digo calcadas, vuelvo a insistir en la literalidad... hay momentos en que sabemos lo que va a suceder en la película porque ya lo hemos visto en otras películas y esta falta de originalidad, junto a cierto tono infantil, es lo que realmente lastra una película que podría haber significado un nuevo camino en el cine de animación de Pixar

De todas formas, aplaudo la decisión de Disney y Pixar de ir en dirección contraria a lo que el espectador espera de una película de animación venida de ellos. La película es entretenida, tiene algunos momentos excelentes y demuestra que en animación, aún quedan muchas historias por contar.