Odio a muerte las comedias románticas. Ni me hacen gracia, ni me entretienen, ni las historias de las parejas me suelen gustar. Nada. Es el peor género de la historia del cine, junto, claro está, con las pelis de catástrofes.

"Cómo perder a un chico en 10 días" (el título de por sí espanta) es un ejemplo muy característico del género: a dos personajes absolutamente estereotipados se les presenta una situación inesperada y, poco a poco y sin quererlo, se empiezan a enamorar y bla bla bla. El final de todas estas pelis lo conocemos de sobra, así como cada uno de los gags, para nada originales y un insulto al séptimo arte.

Si quieres perder tiempo y dinero de la manera más tonta, ésta es tu película. Y es que convivir en un piso de estudiantes tiene sus cosas positivas y sus cosas negativas, y vivir con gente de nulo buen gusto cinematográfico está en la segunda lista.