Average rating
6.2
Ratings
2,855
Reviews
70
Lists
2
Movie recommendations
- Ratings by category
- Contact
-
Share his/her profile
jbm1966 rating:
5
Language of the review:
- es
January 16, 2011
6 of 8 users found this review helpful
He ido a ver esta película porque Weir es siempre una garantía para mí.
Veamos de qué va: unos cuantos prisioneros de un gulag se fugan y atraviesan Siberia, Mongolia, China, Tibet hasta llegar a la India durante la segunda guerra mundial. Decían que está basado en hechos reales pero luego se ha demostrado que el autor mentía aunque este adujo que se basaba en realidad en la historia de un soldado polaco. En cualquier caso, nos encontramos ante una propuesta con un planteamiento claro: viaje interior y exterior de un grupo de seres humanos enfrentados a condiciones difíciles. El viaje exterior, Weir y su guión lo resuelven al gusto del productor que es National Geographic y, por tanto, se requieren espectaculares paisajes muy bien fotografiados en los que se recrea demasiado. Esto, claro, afecta gravemente al ritmo de la película que, en algunos tramos, se vuelve soporífera (la travesía por el desierto mongol). Caminan y caminan y están siempre enteros incluso en las condiciones más penosas. Quiere ser un canto a la solidaridad, supongo, pero a mí me ha chirriado por lo forzado. Solo la muerte aporta algún elemento dramático a tan aburrido viaje. Los personajes están esbozados con algunos planos, unos con más fortuna que otros. El protagonista parece un ingenuo que busca que lo suiciden, el abuelete, Ed Harris, está más acertado, bien perfilado el convicto (Colin Farrell). Otros, simplemente, aparecen de repente en la película. Hay saltos temporales muy extraños (Atraviesan China como si fuera Menorca) De nuevo, parece que en la sala de montaje han metido la tijera sin contemplaciones con la verosimilitud. La solución era fácil: menos personajes, menos situaciones, menos metraje, pero se ve que era demasiado fácil y hay que complicarse la vida.
En cuanto al viaje interior, a esa transformación espiritual que se pone en marcha al enfrentarte a condiciones tan extremas, brilla por su ausencia.
Veamos de qué va: unos cuantos prisioneros de un gulag se fugan y atraviesan Siberia, Mongolia, China, Tibet hasta llegar a la India durante la segunda guerra mundial. Decían que está basado en hechos reales pero luego se ha demostrado que el autor mentía aunque este adujo que se basaba en realidad en la historia de un soldado polaco. En cualquier caso, nos encontramos ante una propuesta con un planteamiento claro: viaje interior y exterior de un grupo de seres humanos enfrentados a condiciones difíciles. El viaje exterior, Weir y su guión lo resuelven al gusto del productor que es National Geographic y, por tanto, se requieren espectaculares paisajes muy bien fotografiados en los que se recrea demasiado. Esto, claro, afecta gravemente al ritmo de la película que, en algunos tramos, se vuelve soporífera (la travesía por el desierto mongol). Caminan y caminan y están siempre enteros incluso en las condiciones más penosas. Quiere ser un canto a la solidaridad, supongo, pero a mí me ha chirriado por lo forzado. Solo la muerte aporta algún elemento dramático a tan aburrido viaje. Los personajes están esbozados con algunos planos, unos con más fortuna que otros. El protagonista parece un ingenuo que busca que lo suiciden, el abuelete, Ed Harris, está más acertado, bien perfilado el convicto (Colin Farrell). Otros, simplemente, aparecen de repente en la película. Hay saltos temporales muy extraños (Atraviesan China como si fuera Menorca) De nuevo, parece que en la sala de montaje han metido la tijera sin contemplaciones con la verosimilitud. La solución era fácil: menos personajes, menos situaciones, menos metraje, pero se ve que era demasiado fácil y hay que complicarse la vida.
En cuanto al viaje interior, a esa transformación espiritual que se pone en marcha al enfrentarte a condiciones tan extremas, brilla por su ausencia.
SPOILER ALERT: The rest of this review may contain important storyline details.
View all
Spoiler:
El protagonista llega tan ricamente a la India, como si fuera uno de esos viajeros profesionales de los programas de la tele.
El epílogo final es sobrante y, si uno lo piensa, absurdo.
Me han gustado los personajes de Colin Farrell (el convicto) y el de Ed Harris (el abuelo). Me ha gustado la fotografía (a la fuerza). No me ha gustado que se le dé tanta importancia al paisaje. Supongo que Weir intentaba que fuera un personaje más. A mi modo de ver, se trata de un intento fallido porque perjudica al desarrollo del filme.
El epílogo final es sobrante y, si uno lo piensa, absurdo.
Me han gustado los personajes de Colin Farrell (el convicto) y el de Ed Harris (el abuelo). Me ha gustado la fotografía (a la fuerza). No me ha gustado que se le dé tanta importancia al paisaje. Supongo que Weir intentaba que fuera un personaje más. A mi modo de ver, se trata de un intento fallido porque perjudica al desarrollo del filme.