De las mejores películas de terror que he visto, no por sus efectos especiales ni por su gran inversión en producción, tampoco por sus esmerados guiones si no por el arte cinematografíco reflejado en ella; espacios naturales de los polos glaciares usados como centro operativo de investigadores que se encuentran allí aislados del mundo, cada uno tiene que confiar en los otros y eso no va ser nada facíl cuando descubren una "cosa" que no se sabe que es pero que no es de este planeta (eso fijo).

El gran dilema de la criatura desconocida que antes de conocerla debemos matarla porque si no ella nos matará a nosotros, tenemos tanto miedo a lo desconocido que nos dejamos llevar por el pánico hasta tal punto que no nos creemos los unos a los otros y lo que empieza como una rutinaria expedición en busca del "Yeti" acaba en un dilema del cluedo ¿Quien será el asesino?...

Un 9 para John Carpenter en una de sus mejores películas, a mi gusto.