Los japoneses, puestos a hacer películas raras, se las pintan solos. Tienen hasta su propio estilo a la hora de hacerlas. Y uno, cuando se pone a ver japonesadas de estas de serie B ya cuenta con que se va a encontrar con actores pésimos dando alaridos sin venir a cuento, tipas flacuchas vestidas de colegialas haciendo kárate, escenas gore retorcidas, humor marciano, erotismo (por llamarle algo) todavía más marciano, monstruos, momentos melodramáticos difícilmente comprensibles y peleas del estilo de las que podían verse en los "Power Rangers" o en los "Bioman".

Naturalmente, "Zombie ass: toilet of the dead" tiene todo eso. Y además tiene zombis que salen de una letrina campestre y lanzan chorongos al personal. Y gente potando a chorro. Y mozas comiendo gusanos. Y parásitos anales asesinos. Y mierda. Mucha mierda. Y pedos. Pedos en cantidades industriales.

Y diálogos llenos de perlas como "Este culo se ha comido mi bate", "haré lo que sea para ayudar a quien me necesite, aunque tenga que tirarme un pedo", o "cuidado, que nos lanzan mojones".

Todo ello, por supuesto, rodado y montado de cualquier manera y adobado con una música que podría haberla compuesto yo con lo que quede del órgano Casio que me regalaron por la primera comunión y unos efectos especiales deplorablemente cantosos.

No se puede negar que es mala con ganas, pero yo tampoco puedo negar que me he reído a carcajada limpia viéndola. Por eso la salvo de la quema aunque objetivamente lo mejor que se podría hacer con ella es...mandarla a la mierda...