El amor es sufrido y considerado, nunca es celoso. El amor no es jactancioso o engreído, nunca es grosero o egoista, nunca se ofende ni es resentido. El amor no haya placer en los pecados de los demás y se deleita en la verdad. Siempre está dispuesto a escusar, confiar, esperar y soportar todo lo que venga.
Creo que este texto es, sin duda, una de las cosas que más me ha aportado de esta película, al escucharlo por primera vez no podía evitar sentir que cada palabra que escuchaba tenía sentido dentro de mí.
La película al completo es una maravilla, una más de las que guardaré para ver una y otra vez durante mi vida.