Horrible Bosses es una comedia con bastantes chistes sexuales que van a satisfacer a los cinéfilos que sepan a que van.

La premisa suena muy divertida, incluso un poco más que la película en si. Los personajes son verdaderamente graciosos pero eso si, tontos, son tres amigos que por muy malas decisiones comienzan a desmoronar sus mundos.

Los jefes sacan más de una risa, desde la sexual Aniston hasta el cabrón Spacey.

Algo bueno es que en realidad no sabe hacia donde irá la película, tal vez sólo en los últimos minutos.

Aunque el guión sea bastante fácil planteando a los personajes demasiado caricaturescos, Horrible Bosses es una comedia que funciona muy bien. Más de una risa garantizada.