Nos encontramos ante una de tantas películas de universitarios desmadrados y obsesionados por el sexo que proliferaron desde principios de los ochenta hasta mediados de los noventa, cuyos máximos exponentes pudieran ser "Porky's" y "Desmadre a la americana". Estas películas sólo buscaban sacar unas risas a base de gamberradas y enseñar de refilón la anatomía femenina a jovenzuelos imberbes.

En esta ocasión la historia se desarrolla en una especie de apartahotel lleno de chicos y chicas sin más preocupación que divertirse. Dos chicos de hermandades enemigas se retan a ver cual de los dos se acuesta antes con una espectacularmente bella Sheree J. Wilson. Es impresionante lo bonita que era esta mujer de joven.

Aunque la trama es simpática y los personajes también, se echa de menos que haya el humor burdo e irreverente de este tipo de películas. De hecho, prácticamente no hay gags de ningún tipo. Eso hace que quede un poco sosa.

Que el patoso del grupo sea el que más triunfe con las mujeres no se lo traga nadie, pero es el único que da pie a escenas con algo de gracia.

Se deja ver sin complicaciones, pero es demasiado light.