Bruce Nolan (Carrey) es un reportero con una gran mala suerte, es por esto que le echa toda la culpa de lo que le pasa a Dios (Freeman)...hasta que éste se harta de sus quejas y le obliga a hacer su "trabajo" durante una temporada (esto incluye tener poderes infinitos... pero también tener responsabilidades con los "hijos de dios" y todo el que ora).

Así que tenemos a Jim Carrey como Dios; un dios gamberro, inexperimentado, muy humano, caprichoso y... un "pelín" divertido.

En fin, es otra bufonada (una de las más taquilleras y exitosas, por cierto) al servicio de Jim Carrey y sus histrionismos... aunque precisamente "Como Dios" puede que sea la comedia de Carrey en la que sus gestos y sellos personales resultan menos primordiales e importan menos que el guión de los chistes y gags (cosa buena, ya que esas cargantes gesticulaciones no despiertan la risa a no ser que las acompañe un buen guión cómico... y afortunadamente la premisa de la historia es lo suficientemente aprovechable como para ofrecer un material narrativo mínimamente entretenido y unas gracias que en ocasiones resultan ocurrentes y cachondas).

Pero es cierto que las gracietas de la peli no son continuadas ni extremadamente hilarantes (una lástima, ya que la premisa podía haber dado sin lugar a dudas lugar para ello). En "Como Dios" se observa un planteamiento original con potencial para una película desternillante minuto a minuto, una idea no aprovechada del todo (aunque sí mínimamente... y como el supuesto es bastante provechoso, pues la cinta salva los platos).

Así que "Como Dios" resulta una película con potencial desaprovechado, con cierta moraleja redemptora pastelosa demasiado vista con la que gasta demasiados minutos, con un ritmo algo lento y una sucesión de gags demasiado espaciados... aunque eso no quita para que esos gags de situación sean al menos llevaderos, algunas de sus situaciones cómicas resulten inesperadas e indelebles, algunos diálogos y monólogos tengan cierta ironía inusitada, y haya bastantes guiños oportunos que despiertan la complicidad dentro de sus gracias.

Resumiendo, algo lenta y con pocas dosis de comedia, pero con algún que otro puntazo ingenioso que dejará un saldo de alborozo. Esta "gracia" tiene una fotografia muy iluminada, colorista y agradable para transmitir su buen rollito, unos actores experimentados que cumplen sin brillar demasiado y una premisa explotada a medias. Todo esto hace que la cinta resulte curiosa y haga reir de vez en cuando tontamente... pero a la tercera vez que se ve ya no hace gracia alguna. Sus chistes nunca llegan a ser muy divinos en perspicacia... solo puramente mortales y se desgastan a ritmo vertiginoso cuanto más se ven.

Lo mejor: ...