Cuando una película está bien construída, cuenta con un guión sólido y está interpretada de una manera notable, el resultado es una película solvente e inteligente. Michael Clayton es un buen ejemplo de ello.

En primer lugar la película está dirigida de una manera más que notable para un debutante en la dirección aunque no en la construcción de guiones (hay que recordar que Tony Gilroy es el autor de los guiones de la brillante saga de Jason Bourne) La trama evoluciona de una manera muy eficiente en la que se dosifica el suspense mientras se intercalan momentos de relativa tensión que hacen que el espectador vaya adquiriendo un interés creciente por la historia. Aun así hay ciertos momentos en los que la película divaga levemente y la acción se neutraliza a través del transcurso de las investigaciones que se llevan a cabo. La historia, eso sí, está algo trillada ya en el cine actual (véase la reciente "El jardinero fiel") aunque hay que reconocer que el mundo de los trapos sucios de las grandes corporaciones es un filón que todavía puede seguir siendo explotado sin temor a que se agoten las fórmulas de su éxito.

La parte interpretativa no deja de ser menos interesante. George Clooney es la columna vertebral de toda la película y realiza una interpretación contenida y creíble aunque con sus típicas expresiones faciales de "me molo a mí mismo" Personalmente me gustó bastante más su actuación en "Syriana". Sydney Pollack demuestra que es mejor actor que director y Tom Wilkinson una vez más en su línea convincente aunque con cierto histrionismo. Por último, Tilda Swinton, a pesar de su tremenda extrañeza y gelidez extrema, se adapta al papel aunque con cierta tirantez e incomodidad.

Técnicamente, "Michael Clayton" es una película sobria y fría a la vez que contundente y convincente. No destaca nada, quizá porque el conjunto es tan homogéneo que impide ver más allá de la historia que se pretende contar. Lo mejor sin duda es una notable manera de resolver la trama y una parte final que resuelve completamente la película cargando de sentido y credibilidad la confusión creada en los minutos precedentes.