Cuando vas a ver una segunda o una tercera parte o un remake te tientas la ropa. Estas sagas río suelen defraudar desde el minuto cero y te preguntas para que se ha hecho. Ya no recuerdo si esta es la décima o undécima película de Michael Myers y yo solo disfruté de la primera porque era para mayores de 18 y pude colarme en el cine Babon de Valladolid que la proyectaba en programa doble con una comedia italiana de las de Jaimito. Del resto solo vi la del 25 aniversario y no me gustó en absoluto, así que es lógico deducir que no soy un gran fan de la saga creada por el maestro Carpenter. Y dicho todo esto sólo puedo decir, tras volver a ver la primera parte, que la estrenada esta semana es, con mucho, la mejor de todas.
El productor Jasón Blum con la asociación de Carpenter y Jamie Lee Curtís han vuelto a sacar al mejor asesino en serie de todos los tiempos y lo han hecho mejorando todo lo que tenía la primera parte. Una actualización que gustara a las nuevas generaciones y no defraudará a los fans. La historia es la de siempre pero parece nueva y la música original de John Carpenter es un clásico único que no puede faltar y que suena mejor que nunca.
Sustos que te esperas y cuando llegan te asustan porqué están muy bien realizados y la edición es maestra.
Nadie sabe si Myers volverá a asustarnos en una nueva entrega pero sus productores han acertado plenamente. Muy recomendable.