No pudo ser más prometedor el debut de De Niro tras las cámaras. La verdad es que podria haber quedado como una obra maestra porque la historia es muy buena y tiene aroma de clásico. Pero tiene un par de problemas que la alejan de ese nivel.

Por un lado, el guión tendría que haberse pulido mucho más, tiene muchos momentos tontos, pero los compensan otros momentos que son memorables (especialmente los que tienen que ver con la educación del protagonista tanto con su padre como con su mentor). Por otro lado, a nivel técnico se le nota a De Niro que es novato. Copia algunos planitos de su amigo Scorsese, pero la mayor parte del metraje no es demasiado creativo con la cámara, además en el montaje hay más de un fallo cutre y se abusa del recopilatorio musical omnipresente.

Pese a ello, debe ser uno de los mejores retratos que se han hecho en cine sobre el pueblo italoamericano (que no de mafia, pues no es una peli sobre la mafia), superando incluso a algunas de Scorsese. No está al nivel de Los Soprano o Uno de los nuestros pero podría entrar en un siguiente escalón. Recuerdo que un par de años después intentaron emular la fórmula en Sleepers con menos fortuna (aunque tampoco era mala peli).