Voy a empezar por lo que me gusta:

-En la guerra, como en el amor, desde luego no vale todo, y la acción del señor Kessler es una prueba. El director se recrea en ello, porque lo cuenta más de una vez. Y sin apoyarse en imágenes, lo que aún me gusta más.

-Se nos incita a amar el trabajo a pesar de las dificultades. Aunque creo que esto se muestra mejor en "El manantial", de King Vidor.

El problema es que lo que no me gusta lo detesto profundamente. Ya sé que en sus primeros tiempos la aviación era mucho más arriesgada que ahora. Pero no hace falta, y odio, que la peli sea una exhibición de total desprecio por la vida propia y ajena. Por parte de los pilotos, el público y no digamos los empresarios. No me da la impresión de que el director quiera criticar el morbo de la gente y la competición de los pilotos a ver quién los complace más.