La idea de un Superman maligno para nada es novedosa, fíjense que en 1969 se creó el personaje de Hiperión después que Stan Lee cancelara un crossover de Los Vengadores con La Liga de la Justicia. Desde entonces hemos conocido muchas versiones malignas de Superman, desde el ahora famosísimo Patriota en ‘The Boys’, Irredeemable, Miracleman con Alan Moore a los guiones, el Vigía en Marvel o el mismo Hiperión en Supreme Power.

En el cine quitando la peli de Handcock o Chronicle la película es un experimento original y agradable de ver. Me encantaría ver más clases de estas pelis a lo What If o Elseworlds, con versiones imposibles de ver con los personajes de la Marvel o DC. Sin embargo, ‘El Hijo / Brightburn’ me ha resultado una película incoherentemente aciaga y defectuosa. No tiene sentido casi ninguna de reacciones entre los personajes, si tuviéramos en frente una peli de serie B o Z lo comprendería, pero no en esta producción.

Las incoherencias las explico en la zona con spoiler.

He de reconocer que lo mejor ha sido el arco final, especialmente el final. Gracias al mismo me he animado a calificarla con un 4.

En definitiva, mi crítica no es al hecho de la producción de estas pelis sino a una película con reacciones fuera de lo creíble o incoherente.