Based upon a truth story.

Sólo con ver ésta frase, involuntariamente nuestro cerebro se va a producciones de "siesta" de domingos, con casos imposibles de violaciones, maltratos, embarazos juveniles y demás parafernalia de tv movie.

Pero ésta vez estamos en España, asistiendo atónitos a un trabajo brillante del de los bífidus (por fin!), acompañado por una siempre brutal Adrina Ozores.

La vida de nadie. La historia de nadie y las mentiras de todos. Todos hemos mentido alguna vez, todos hemos ocultado -con mayor o menor acierto- algo alguna vez. Y los medios seguro que engrandecían los fines, pero se corre este peligro.

El peligro real de que hundas a tu familia, a tus amigos, a tu vida por algo que en algún momento surgío y luego se convirtió en un bucle demoníaco que te iba a pedir como precio para pararlo algo tan sencillo como lógico: tu vida.

A parte de disfrutar con la película, con cada fotograma, con cada dato, con cada imágen; hemos de dar las gracias, por fin, al cine Español; por encontrar una idea, vestirla de un sólido argumento, rodearla de buenas interpretaciones y hacernos disfrutar.

Lo malo es que tras cuatro o cinco grandes películas de la época, hemos vuelto a lo mismo, pero ahora que sabemos que alguien sabe hacer buen cine, crucemos los dedos y apretemos fuerte los ojos deseando que se vuelva a repetir...