He de reconocer que al principio la película tiene sus puntos de gracia, pero conforme avanza pierde misterio (pues ya conoces el desenlace por la original) y del humor tan facilón y estúpido ya hasta te cansas. Abusan demasiado de las analogías con sus concursos, los personajes como Paris Hilton y Britney Spears no sé qué pintan aquí y el uso del recurso de la homosexualidad se vuelve ya hasta cansino (si piensan que con eso hoy en día van a hacer gracia...). No me gusta tampoco la gracia que parece querer provocar la violencia que Leónidas descarga sobre su hijo. Al principio, por inesperado te ríes, pero luego cuando ves el maltrato tan exagerado la verdad es que te preguntas cómo todavía pueden usar esos recursos en películas tan tranquilamente, tal y como está el tema. Me sorprendió positivamente que tenga hasta su propia banda sonora épica; yo creo que en eso y en vestuario se han gastado más que en toda la película.

Mi mujer se empeñó en alquilarla por verla... bueno, un euro veinte por echar un rato... Pero gastarse cinco euros en el cine me parece una locura. No le llega ni a la suela a otras patochadas como Scary Movie.