La película es podridamente mala, pero queda la cuestión de ver si la gente le pone uno por las mismas razones que yo lo hago... detectan, es verdad, una cierta atmósfera idiotizante, pero sin decir claramente de dónde viene.

Pues bien, me ha tocado a mí decir exactamente dónde radica la podredumbre de esta cinta que en realidad tiene un buen cast, buena música, buena fotografía y buenos escenarios.

Arruinados por un director incompetente.

Incompetente director no entender personajes, dar las órdenes equivocadas, especialmente en lo que respecta a personajes mujeres ¿Susan Parrish? ¡Ninguna mujer es así! Me he reído a más no poder (y he sentido vergüenza ajena a partes iguales) con su patética Susan Parrish, sin poder hacer contacto visual, bajando la mirada durante TODA la película. ¿Lo notaron, que se pasa bajando la mirada durante toda la película? ¡Nadie hace eso! Vale que en una escena, pero no en toda la maldita película me estás cargando.

Baja la mirada y ríe, baja la mirada y ríe, baja la mirada y ríe, luego hacer cara de cachorro, cara de cachorro, cara de cachorro. Y así por tres horas. Es frustrante, patético, hilarante, digno de un millón de Razzies, romance no hay, sino todo lo contrario una especie de autismo pre-adolescente autosatisfecho de baja funcionalidad; Joe es otro autista, este pobre sujeto no podría ni peinarse si la película fuera consistente ya que todo el tiempo anda diciendo cosas raras y mirando al vacío, o jugando sobre una silla giratoria, o comiendo azúcar como niño de nueve años. Muy mal dirigidos los actores.