Cuando era muy pequeño y escuchaba en las películas "he tenido una aventura" pensaba que esa persona había recorrido los bosques encima de un blanco corcel por alguna misión, encontrado un tesoro en alguna isla, navegado por los 7 mares... pero luego ya me di cuenta de que así es como los americanos se refieren a poner la cornamenta. ¿Por qué? No lo sé.

Los puentes de Madison podríamos decir que va de eso, de tener una aventura, de ser infiel, de poner los cuernos, del adulterio, de la traición conyugal... pero otros dirán que va de sueños frustrados, de sacrificio, del amor...

Analicemos los hechos:

1. Matrimonio con 2 hijos. Él se va un fin de semana con los hijos y ella, ama de casa de mediana edad, se queda sola en casa.
2. Un fotógrafo pasa por delante de la casa de la protagonista (que no es otra que Meryl Streep) y le pregunta dónde está un puente.
3. Cervezas, notitas, cena y casquete, casquete, casquete.

Bueno, puede que sea el amor más verdadero puro y profundo de la historia, pero ver yo no lo veo. Lo que sí creo es que esta peli hizo volar la imaginación de muchas mujeres de muchos países, y si hubiera estado protagonizada por un galán típico (George Clooney, Sean Connery, Paul Newman, Robert Redford...) ya ni te cuento.

La cuestión es que está dirigida por Clint Eastwood, y este hombre de cine sabe algo. Tanto es así que sabe hacer de esto una historia entretenida, apasionante, memorable... y con uno de los desenlaces más emotivos y mejor dirigidos de la historia del cine.