Otro caso, el de Gianni Versace, y otro enfoque. Si en la primera temporada nos centrábamos en el proceso judicial del caso OJ, en los entresijos de la acusación y de la defensa, en el impacto social y en la incertidumbre que generaba la figura del protagonista incluso para sus más allegados en esta tenemos un planteamiento totalmente diferente. Partimos del asesinato y retrocedemos para conocer toda la historia del asesino. Vemos de dónde sale ese joven, cuáles son sus traumas, sus pensamientos, sus motivaciones, sus delirios, conocemos todas esas personas que, por desgracia, toparon con este individuo y cuáles y cómo fueron el resto de crímenes que cometió antes del que titula esta temporada.

Pese a estar por debajo de la primera temporada, que fue sobresaliente, tenemos aquí una notable segunda parte totalmente recomendable.

Por cierto, Darren Criss lo debe de hacer muy bien aquí porque da un repelús que flipáis!