Lo primero que llama lo atención de "Sleepers" es su amplio y prestigioso reparto. No es fácil reunir en el mismo título a actores como Robert De Niro, Dustin Hoffman, Brad Pitt o Kevin Bacon, entre otros. Lo segundo, es que la película va sobre abusos sexuales. De hecho, esto es lo único que recordaba, cosa más bien comprensible si tenemos en cuenta que la vi al poco de su estreno, es decir, sobre 1996 o 1997. Sea como fuere, se basa en la novela autobiográfica homónima de Lorenzo Carcaterra, no exenta de polémica en tanto que muchas fuentes niegan que lo que describe pasara alguna vez. Mi impresión es que ciertamente parece inventado.

El caso es que tenemos un relato duro sobre abusos sexuales a menores, reformatorios, asesinatos, venganzas y juicios, que podría quedar muy bien pero que no consigue llegarte. Sobre todo en la segunda mitad, la narración se vuelve un tanto confusa, y tanto el plan como el juicio resultan poco creíbles. El papel de la chica está metido con calzador y desentona demasiado. Sin embargo lo peor no es que la historia sea inventada o no, si no que tal y como está contada no parece verosímil. Y eso afecta seriamente a "Sleepers". Con todo, se deja ver y sirve para denunciar estos abusos sexuales cometidos, cosa en la que nunca se incide, por homosexuales.