Vaya pedete de peli me acabo de tragar leches… Y eso que iba preparado, ya que el director es de esos dudosos, tiene sus seguidores, pero a mí nada o poco me dice su opera prima “Transporter”, que le catapultó increíblemente a la fama, ni su secuela. Solo me pareció algo original “Danny The Dog”, pero sin volverme loco.

Luego está el ceporro de Sam Worthington, del cual ya tengo que pronunciarme de una vez, visto que este colega no levanta cabeza: “Sam eres malo, muy malo, dedícate a otra cosa por bien de la humanidad, esto de actuar no es lo tuyo, replantéatelo”. Este chico es un actor pésimo y me temo que lo será toda su vida.

El esperpento del film en cuestión hace bueno a cualquier adefesio similar, y eso que paso totalmente de comentar nada del inexistente y tramposo 3D, y también paso de comentar nada de los putos cameos que las productoras últimamente ponen el los créditos junto a los mediocres actores principales. Si, paso de todo esto, por lo que no paso es que tengas unos libros cojonudos para hacer una peli mitológica estupenda y te pongas a inventarte gilipolleces poniéndote por encima del mismo Homero, solo porque que los guionista son unos descerebrados, unos catetos o se creen muy por encima incluso de los dioses de Olimpo.

Hace poco, muy poco que vi la de “Percy Jackson”, engendro parecido a este y con cagadas en el guión sonrojantes, pero al fin y al cabo respetaba el orden del mundo del Olimpo, todos eran quién tenían que ser, no inventaban nada. Pero estos colegas, ni más ni menos que ¡Cinco! no tienen ni puta idea de la mitología clásica. Y eso que uno de ellos es ni más ni menos que Lawrence Kasdan (“Silverado”, “El turista accidental”, “Fuego en el cuerpo”….). En fin volvemos a la incultura yankee que se da en tantas y tantas películas, los tíos no tienen solución.

Siguiendo con los amigos guionistas decir que los diálogos son de una besuguez difícil de igualar, no hay un diálogo en todo el film que se salve, a veces de puro imbecil que es el asunto te cuesta hasta entender que narices quieren contarte, verdaderamente patético.

Terminar diciendo que los efectos, pese a ser correctos, no sorprenden ni lo más mínimo, y que pese a que la duración del film sea corta, y esté hecho solo para comer palomitas sin exprimirte el coco, consigue a ratos aburrir sobremanera, ya que en tan corto periodo de tiempo les da hasta para filosofar estupideces de mala manera.

Un dos por algún efecto que otro, un cero en su conjunto.