Pues eso, Cars es un ejemplo de cómo realizar una gran película a partir de un esquema argumental algo arquetípico en el cine de animación e incluso en el de acción real. El personaje de ciudad y engreído que descubre las virtudes del mundo rural.

El alma de la película se encuentra en la entrañable personalidad de todos los coches secundarios que pueblan la localidad de Radiador Springs, entre los cuales me quedo con la grúa Mater y los italianos Guido y Luigi, aunque el personaje de Doc también sea fundamental en la historia.

Visualmente se aprecia un gran esfuerzo en intentar dotar de expresividad a los coches y algunos efectos de iluminación o el diseño de los decorados son bastante impresionantes. A pesar de ello los personajes-coche no dejan de resultar algo fríos en ocasiones, especialmente durante las carreras, donde resulta algo difícil identificarse con ellos y parecen más elementos de atrezzo en una especie de videojuego, como se ha comentado. Asimismo el protagonista o Sally son ligeramente rígidos en su diseño. Mater o los tractores resultan más logrados debido a su cierto parecido con algunos animales.