Bastante convencional biopic sobre Chuck Wepner, el boxeador de los pesos pesados que le aguantó hasta el último asalto a, nada menos que, Cassius Clay (por aquél entonces ya convertido en Muhammad Ali).
No está mal, no aburre, pero pasan los minutos de forma distraida sin que ocurra nada verdaderamente perdurable en la memoria del espectador pasados unos minutos tras su visión.
Sí que hay algunos personajes francamente conseguidos, como el hermano del protagonista, un sobrio Michael Rapaport, o el de Naomi Watts, en el papel de una buena mujer baqueteada por la vida que ayuda al protagonista cuando es preciso y no le dora la píldora, mostrándole respeto y no falsa amistad e idolatría.
Buena banda sonora compuesta de preciosas canciones de la época y, repito, un deambular por el drama humano de Chuck que tiene algunos momentos duros y conmovedores otros penosos (la prueba con Stallone para "Rocky 2") amén de patéticos (la reunión en el colegio de la hija), mostrándose el descenso a los infiernos de un hombre corpulento y fuerte físicamente, pero débil en cuanto a las obligaciones matrimoniales (también es meritoria la escena en la que la esposa del protagonista le dice las verdades del barquero al presunto ligue de su marido) y como padre.
Se puede ver sin problema alguno pero la considero manifiestamente mejorable por no haber profundizado más (bueno, y como aficionado al boxeo por no haber más combates y/o más duraderos... aunque no hacía falta la verdad).

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