Por ser una película protagonizada por Van Damme se puede decir que está bastante pensada en su argumento, con más diálogos y menos patadas de lo normal, y con efectos especiales más conseguidos que los que generalmente aparecen en este tipo de obras.

Ahora bien, si bien la cinta es sobria y sin tantos disparates argumentales, a mi gusto se hace bastante insípida y poco estimulante a pesar de que en su metraje desarrolla vértigo y acción todo el tiempo.

Es extraño, uno generalmente se queja y se termina riendo de las películas de Van Damme donde sólo hay patadas voladoras y coreografías de lucha. Y cuando se trata de proyectar algo más elaborado y aplomado, sale un producto como éste, el cual no entusiasma porque le falta chispa e intensidad en la confección del guión.

La historia no absorbe en la magnitud que una cinta de acción-ficción debería: hay muchas idas y vueltas en el argumento con conspiraciones y viajes en el tiempo para alterar maliciosamente el pasado, también aparecen los trillados enredos donde pasado y futuro entran en conflicto ya que una misma persona aparece en dos cuerpos distintos al mismo tiempo, se mete la típica historia de amor que anima al protagonista a arriesgarse y repartir violencia a todo aquel que se le cruce por su camino, y al querer darle solidez al argumento lo terminaron complicando de más y por ello el filme se presenta poco atractivo y enredado en sus variantes.

En fin, sigo sin encontrar el punto ideal para las películas de Van Damme. Pues en esta propuesta se nota que se intentó sacarle acción y violencia y dotarla de giros narrativos y un argumento más complejo.
No obstante tampoco da resultado, la cinta es más sobria -aunque tiene fallos en su guión- pero no entretiene ni tiene casi alternativas por las cuales recordar a este filme.
Es una cinta aburrida, de a ratos confusa y muy poco estimulante en sus planteos por ser una opción de ficción futurista. Por tanto es fallida a pesar de que se nota que han intentado cambiar la fórmula.