Hacía ya algunos lustros que no había vuelto a ver esta obra maestra de V. Erice, no recordaba ya cual era la trama pero sin embargo recordaba lo mucho que me agradó cuando la vi por primera vez, ayer la volví a ver y pese al paso del tiempo no me decepcionó en absoluto, cosa que sí me ha ocurrido con otras películas, volví a disfrutar del film como si se tratara de una obra maestra de la literatura, una história contada con todos los matices que el director ha querido reflejar. Con un ritmo fluido y denso a la vez que le dan el cuerpo necesario para ser un film redondo.
Los no acostumbrados a que les cuenten historias no les conviene meterse en este tipo de cine, no hay efectos especiales ni explosiones espectaculares, sin embargo si se goza de un mínimo de sensibilidad quizá disfruten de la relación humana que va rezumando la obra.