Película de mensaje religioso, concretamente cristiano. En España no estamos acostumbrados a películas de mensaje claramente religioso, en este caso evangélico y por ello tampoco estamos muy capacitados para evaluarlas de manera objetiva, normalmente cuando se hace se las critica sólo por el hecho de que sea relgiosa, como si serlo fuera malo (y eso que la motivación religiosa siempre ha dado grandes obras en la historia del arte).

La película, sin grandes pretensiones pero entretenida, presenta diversos conflictos humanos cotidianos protagonizados por cuatro agentes de policía. Tiene la virtud de tocar varios temas muy complejos en el tiempo que dura la película sin que de la sensación de saturación ni que parezca muy forzado. Me parece una película que se debería ver por lo original que nos va a resultar,emotiva, familiar con un fondo ético más que interesante en el que se resalta la honradez, la espiritualidad y el perdón ( justo valores que escasean hoy en día). Eso si, hay que verla como se debe ver cualquier film, sin prejuicios, en este caso antireligiosos, sólo así se va a disfrutar de manera correcta.

Sinceramente esperaba algo de esta supuesta comedia, pero la realidad fue peor, una pesadilla. Directamente y sin rodeos he de decir que es muy mala. El guión es un continuo y cansino despropósito de frases basadas en "caca, culo, pedo, pis," escatología adolescente a raudales, pero ni los personajes son adolescentes ni tienen la ingenuidad y espontaneidad de los mismos, sin la menor gracia. Escenas de sexo fuera de lugar, ramplonas, vulgares, al punto de ser hasta incómodas de ver. Sólo las famosas y polémicas subvenciones al cine Español pueden perpetrar semejante atentado cinematrográfico.