Críticas de Juan Rúas
28 de agosto de 2009
65 de 79 usuarios han encontrado esta crítica útil
Abundan las críticas que señalan su importancia como película ochentosa. Abundan los comentarios sobre el papel legendario de Gizmo y la labor de Spielberg como titiritero de esta obra única. Asi que intentaré analizar Gremlins desde otra perspectiva, esto es, la bajada de linea política detrás de una historia de engendros adorables.
Son chiquitos, peludos y simpáticos, que digo, ni siquiera son. Es uno solo. Representa el equilibrio, la infancia soñada, el peluche deseado por todos. Pero este peluchito no puede mojarse, porque se reproduce y sus hermanos ya no son dulces cositas, son verdaderos adolescentes: rebeldes sin causa que deben ser aleccionados por la sociedad, demasiado distraída en cantar villancicos y armar el arbolito de navidad. Rayita, lleva una cresta: ¡es un monstruo inadaptado! Representa esa vertiente punk aún vigente a principios de los ochenta.
Ni hablar si estos perversitos peludos comen después de medianoche, cuando ya la sociedad duerme para levantarse al día siguiente en busca del capital: el desequilibrio está garantizado, sobre todo si estas cosas verdes se reproducen, multiplicando las malas costumbres... eso que la sociedad se encarga de reprimir.
Lo sagrado salió de una vieja tienda de antiguedades, vino de quien sabe donde, ya estaba, solo necesitaba ser descubierto. Y dió vueltas las cosas, y se llenó de verdades escatológicas. Solo deben ver la luz del sol, o una luz fuerte: quedarán tan en evidencia que ninguno de ellos podrá soportarlo.
Son chiquitos, peludos y simpáticos, que digo, ni siquiera son. Es uno solo. Representa el equilibrio, la infancia soñada, el peluche deseado por todos. Pero este peluchito no puede mojarse, porque se reproduce y sus hermanos ya no son dulces cositas, son verdaderos adolescentes: rebeldes sin causa que deben ser aleccionados por la sociedad, demasiado distraída en cantar villancicos y armar el arbolito de navidad. Rayita, lleva una cresta: ¡es un monstruo inadaptado! Representa esa vertiente punk aún vigente a principios de los ochenta.
Ni hablar si estos perversitos peludos comen después de medianoche, cuando ya la sociedad duerme para levantarse al día siguiente en busca del capital: el desequilibrio está garantizado, sobre todo si estas cosas verdes se reproducen, multiplicando las malas costumbres... eso que la sociedad se encarga de reprimir.
Lo sagrado salió de una vieja tienda de antiguedades, vino de quien sabe donde, ya estaba, solo necesitaba ser descubierto. Y dió vueltas las cosas, y se llenó de verdades escatológicas. Solo deben ver la luz del sol, o una luz fuerte: quedarán tan en evidencia que ninguno de ellos podrá soportarlo.
Serie
2024
12 de mayo de 2024
51 de 56 usuarios han encontrado esta crítica útil
Basada en una novela de Elia Barceló, Las sombras largas se presenta como un drama policial. Treinta años después de haberse graduado de la secundaria, un grupo de mujeres se reúne nuevamente como resultado de la muerte dudosa de una antigua compañera.
Lo bueno:
Notable, minuciosa, casi excelente dirección de actores. Es en su faceta de drama emocional donde la serie demuestra sus virtudes. La búsqueda del detalle, ya sea a la hora de trazar perfiles de personalidad, ya sea en plan de construir una congruencia temporal de acuerdo a cómo eran antes y como son en la actualidad (tanto física como psicológicamente) hacen que el producto se tome en serio. El tono sobrio de la propuesta se mezcla con matices costumbristas en donde las actrices se desempeñan con total naturalidad. Por momentos hasta te sientes parte del grupo, estás ahí, participando de sus momentos. Puede ser al compartir una cena entre ellas, o en el cotilleo de asuntos mundanos del día a día. Es una serie que se sostiene gracias a la labor del elenco de actrices (especial mención para las tórtolas protagonistas. Esa química sí se puede ver).
Lo malo:
Que no es apenas un drama. Es un thriller. A los que adoramos el género policial no nos costará demasiado advertir las serias "red flags" que presenta el caso a la hora de exponer los hechos. Llegado un punto, el asunto se vuelve una pintura al óleo de trazo muy grueso. Resto a spoilers.
Lo bueno:
Notable, minuciosa, casi excelente dirección de actores. Es en su faceta de drama emocional donde la serie demuestra sus virtudes. La búsqueda del detalle, ya sea a la hora de trazar perfiles de personalidad, ya sea en plan de construir una congruencia temporal de acuerdo a cómo eran antes y como son en la actualidad (tanto física como psicológicamente) hacen que el producto se tome en serio. El tono sobrio de la propuesta se mezcla con matices costumbristas en donde las actrices se desempeñan con total naturalidad. Por momentos hasta te sientes parte del grupo, estás ahí, participando de sus momentos. Puede ser al compartir una cena entre ellas, o en el cotilleo de asuntos mundanos del día a día. Es una serie que se sostiene gracias a la labor del elenco de actrices (especial mención para las tórtolas protagonistas. Esa química sí se puede ver).
Lo malo:
Que no es apenas un drama. Es un thriller. A los que adoramos el género policial no nos costará demasiado advertir las serias "red flags" que presenta el caso a la hora de exponer los hechos. Llegado un punto, el asunto se vuelve una pintura al óleo de trazo muy grueso. Resto a spoilers.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
21 de octubre de 2022
50 de 55 usuarios han encontrado esta crítica útil
Un grupo para-policial arma una puesta en escena para intentar "destapar" a un presunto asesino. Necesitan que, de alguna manera, el sospechoso confiese su crimen.
Basado en un hecho real, El extraño encamina su guión con suma prudencia. Es común que este tipo de pelis den prioridad al estilo por sobre el espectáculo. Buscan ser respetuosas, tomar discreta distancia del caso representado. Le rehuye al morbo, a la acción exagerada (en efecto, no es una peli dinámica) y se centra en la atmósfera y dirección de actores.
El estilo policial noir ha sido una decisión acertada. Grisacea y densa, la fotografía logra verse acompañada por un fondo de violines chirriantes, más el gesto apesadumbrado de todos los involucrados. Es una obra de diálogos con un tinte muy violento, turbio, mediante un montaje fluido que ejecuta elipsis cortantes. Desde mi parecer, resulta todo un logro recrear un ambiente tan malsano con pura y dura insinuación, en donde parece que todos ocultan algo, desde el sospechoso hasta los policias, y ese "algo" va recargando de oscuridad el ambiente.
En su apego a un solapado relato periodístico, similar a una crónica y al testimonio en crudo de lo sucedido, Wright sabe camuflar los meros datos mediante un trabajo artístico que le otorga un plus a la propuesta. Quizás pueda echarse en falta un poco más de riesgo en su climax final. Aún así, cierra en su propósito. Logra su objetivo.
Basado en un hecho real, El extraño encamina su guión con suma prudencia. Es común que este tipo de pelis den prioridad al estilo por sobre el espectáculo. Buscan ser respetuosas, tomar discreta distancia del caso representado. Le rehuye al morbo, a la acción exagerada (en efecto, no es una peli dinámica) y se centra en la atmósfera y dirección de actores.
El estilo policial noir ha sido una decisión acertada. Grisacea y densa, la fotografía logra verse acompañada por un fondo de violines chirriantes, más el gesto apesadumbrado de todos los involucrados. Es una obra de diálogos con un tinte muy violento, turbio, mediante un montaje fluido que ejecuta elipsis cortantes. Desde mi parecer, resulta todo un logro recrear un ambiente tan malsano con pura y dura insinuación, en donde parece que todos ocultan algo, desde el sospechoso hasta los policias, y ese "algo" va recargando de oscuridad el ambiente.
En su apego a un solapado relato periodístico, similar a una crónica y al testimonio en crudo de lo sucedido, Wright sabe camuflar los meros datos mediante un trabajo artístico que le otorga un plus a la propuesta. Quizás pueda echarse en falta un poco más de riesgo en su climax final. Aún así, cierra en su propósito. Logra su objetivo.
18 de mayo de 2011
54 de 66 usuarios han encontrado esta crítica útil
Fotografías con fantasmas de fondo; pasillos oscuros; casona vieja; muñecos raros en primer plano; escaleras que rechinan; reloj péndulo con sonidos secos que dan la hora; subidas abruptas del sonido de fondo...mil y un recursos manidos pero Insidious ya armó con ellos su efectivo universo. El terror, el de siempre, no obedece tanto a las ideas como sí a las sensaciones. Las ideas se gastan, las sensaciones no, especialmente esas pasajeras pero intensas.
LO que abruma en Insidious es su poder de síntesis: complementa los elementos claves en cuestión de minutos y te los raciona de una manera como pocas veces se ha visto en las últimas entregas del cine de terror. Por supuesto no hay sangre, esto no es slashers, esto es fantasmagoría pura y dura, con ciertos aires setentosos que le vienen como a la palma de la mano. Están de moda los rituales de espiritismo, la información de lo paranormal como dato duro, como factor netamente descriptivo. En ese aspecto la peli posee su touch modernoso, pero nunca se aleja del espíritu clásico.
Se puede continuar: altilos tenebrosos, canillas que gotean sobre una pileta que genera eco, psicofonías, alguien que relata una historia de fantasmas dentro de la historia y aún así funciona. Salvo por ese final que se retuerce en su propia cola, la piel de gallina está garantizada. Eso es terror, señores y señoras, el aliento en la boca, contenido, la tensión a flor de piel hasta que no dás más y mirás para otro lado menos para la pantalla. Eso es terror señores, el de hoy, el de ayer, el de siempre.
LO que abruma en Insidious es su poder de síntesis: complementa los elementos claves en cuestión de minutos y te los raciona de una manera como pocas veces se ha visto en las últimas entregas del cine de terror. Por supuesto no hay sangre, esto no es slashers, esto es fantasmagoría pura y dura, con ciertos aires setentosos que le vienen como a la palma de la mano. Están de moda los rituales de espiritismo, la información de lo paranormal como dato duro, como factor netamente descriptivo. En ese aspecto la peli posee su touch modernoso, pero nunca se aleja del espíritu clásico.
Se puede continuar: altilos tenebrosos, canillas que gotean sobre una pileta que genera eco, psicofonías, alguien que relata una historia de fantasmas dentro de la historia y aún así funciona. Salvo por ese final que se retuerce en su propia cola, la piel de gallina está garantizada. Eso es terror, señores y señoras, el aliento en la boca, contenido, la tensión a flor de piel hasta que no dás más y mirás para otro lado menos para la pantalla. Eso es terror señores, el de hoy, el de ayer, el de siempre.
Miniserie
2024
Issa López (Creadora), Issa López
20 de febrero de 2024
59 de 77 usuarios han encontrado esta crítica útil
Nic Pizzolatto se ubica como productor ejecutivo de esta cuarta temporada de True Detective. Deja las riendas sueltas para que Issa López se encargue tanto de la dirección como de la construcción de la historia que nos concierne. El resultado, en líneas generales, es un thriller genérico que intenta parecerse, tener aires de familia con la autoría original. Ahora bien, a medida que la trama se desarrolla, saltan como sirenas de ambulancia las brutales diferencias estilísticas entre ambos artistas.
La puesta en escena es un asunto en sí mismo: la serie se siente cómoda dentro de los espacios cerrados. Los planos suelen ser fijos, con desplazamientos ocasionales de cámara. Al rodar en el exterior, en medio de la nieve, canta demasiado el artificio de la puesta en escena. La cámara queda cuasi estática, con algún travelling de alejamiento, sobre la nieve bajo un fondo negro apenas o nada perceptible. La iluminación fuerza los reflectores sobre un área determinada y todo gira alrededor de ese sitio específico.
"Costumbrismo": que no es lo mismo que el "intimismo". La creación de atmósfera era un sello autoral de las anteriores temporadas, independientemente de la calidad final de las mismas. El ambiente se respiraba en el espectador y funcionaba como un reflejo del estado anímico/espiritual de los personajes. Tierra nocturna da paso a un costumbrismo mundano: narra las peripecias del día a día de dos detectives. Muchos de los sucesos fuera de la investigación son mera anécdota.
Personajes: todos diseñados acorde a las reglas de la industria actual. Foster es cabrona y lidera, Reis es cabrona y lidera. Cada una de sus reacciones dan vueltas alrededor del mismo concepto, repitiendo el mismo punto más allá de lo que suceda. A lo sumo se las puede ver y sentir como compañeras distantes de trabajo; con rollos del pasado siempre dialogados, pero pocas veces expresados desde la actuación. Las actrices no congenian.
Historia: la idea no está mal. Un grupo de científicos desaparece, hay cadáveres por ahí. La investigación que llevan a cabo para resolver el caso es displicente. A veces a un nivel que vale la pena preguntarse si a Issa López le interesaba realmente el factor policíaco que tenía entre manos. Algunas secuencias determinantes están manejadas como quien se saca un fierro candente de las manos (esto va a spoilers).
La conclusión final...es demasiada carga el pasado de esta serie para una directora/guionista que juega a otra cosa. Inserta en el aro de basquet una pelota de fútbol.
La puesta en escena es un asunto en sí mismo: la serie se siente cómoda dentro de los espacios cerrados. Los planos suelen ser fijos, con desplazamientos ocasionales de cámara. Al rodar en el exterior, en medio de la nieve, canta demasiado el artificio de la puesta en escena. La cámara queda cuasi estática, con algún travelling de alejamiento, sobre la nieve bajo un fondo negro apenas o nada perceptible. La iluminación fuerza los reflectores sobre un área determinada y todo gira alrededor de ese sitio específico.
"Costumbrismo": que no es lo mismo que el "intimismo". La creación de atmósfera era un sello autoral de las anteriores temporadas, independientemente de la calidad final de las mismas. El ambiente se respiraba en el espectador y funcionaba como un reflejo del estado anímico/espiritual de los personajes. Tierra nocturna da paso a un costumbrismo mundano: narra las peripecias del día a día de dos detectives. Muchos de los sucesos fuera de la investigación son mera anécdota.
Personajes: todos diseñados acorde a las reglas de la industria actual. Foster es cabrona y lidera, Reis es cabrona y lidera. Cada una de sus reacciones dan vueltas alrededor del mismo concepto, repitiendo el mismo punto más allá de lo que suceda. A lo sumo se las puede ver y sentir como compañeras distantes de trabajo; con rollos del pasado siempre dialogados, pero pocas veces expresados desde la actuación. Las actrices no congenian.
Historia: la idea no está mal. Un grupo de científicos desaparece, hay cadáveres por ahí. La investigación que llevan a cabo para resolver el caso es displicente. A veces a un nivel que vale la pena preguntarse si a Issa López le interesaba realmente el factor policíaco que tenía entre manos. Algunas secuencias determinantes están manejadas como quien se saca un fierro candente de las manos (esto va a spoilers).
La conclusión final...es demasiada carga el pasado de esta serie para una directora/guionista que juega a otra cosa. Inserta en el aro de basquet una pelota de fútbol.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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