Puifff, voy a intentar encontrar mi lugar entre los apasionados seguidores de Moore y los puristas amantes del objetivismo que tanto lo odian. Estoy de acuerdo con lo que piensa Moore, creo que tiene mérito el que sea capaz de llegar al gran público con documentales, sus montajes suelen ser ágiles y divertidos... pero sí, es cierto que es sensacionalista, maniqueo y manipulador. En Sicko trata de aparecer menos, pero no puede evitar seguir protagonizando demasiados momentos, sigue siendo el mismo Moore capaz de meter el dedo en la llaga, pero sigue haciendo un uso sesgado de contraejemplos idealizados que no aguantan el más mínimo contraste con la realidad (los sistemas británico, francés o canadiense son mejores que el americano, pero no tan perfectos como quiere hacerlos parecer, si no, ver las invasiones bárbaras). Por otra parte, creo que es absurdo criticar su mensaje político ya que la sanidad es un asunto político (no lo son los enfermos, pero sí el sistema que los trata). En fin, seguiré viendo los documentales de Moore con una sonrisa en los labios, y seguiré pensando que el que existan es bueno para la humanidad, e incluso para el cine... eso sí, cuando escuche que Moore es un sensacionalista y que sus documentales carecen de objetividad, mal que me pese, y en un ejercicio de objetividad personal, tendré que admitir que es cierto.

Una buena película suele dejarte esta sensación extraña en el cuerpo. Una situación degradada, degrada a quien se introduce en ella... y por lo general casi todo el mundo termina corrompido y deshumanizado. El ritmo de la película es trepidante, y se trataría de una obra maestra si hubiese sido un poco más equilibrada. Se toma intencionadamente el punto de vista de los BOPE, no sólo por la forma de filmar sino también por la narración con la voz en off. La visión es necesariamente muy parcial, y no creo que pretenda contribuir a la justificación, pues no se ahorra ninguna de las crueldades cometidas por las fuerzas especiales. Sin embargo, creo que los narcos y los "pijos" pacifistas están un poco estereotipados, los unos aparecen como seres inhumanos y prescindibles, mientras los otros son ridiculizados pese a ser los únicos seres relativamente equilibrados de la peli. No es que uno crea que el director piensa esto, está claro siempre que son los BOPE los que lo ven así, pero sí da la sensación de que el director no deja entrever nada que contradiga esta imagen. Se echa de menos humanidad en los narco y una inteligencia más crítica en los estudiantes...

En resumen, el director hace bien lo que hace y decide contar la historia de las fuerzas especiales desde su propio punto de vista... pero en mi opinión una peli redonda habría requerido un retrato más equilibrado de los 3 grupos que aparecen en la peli, con sus luces y sombras, y sobre todo su desconexión total y su visión parcial de lo que sucede en los otros grupos.

En cuanto uno empieza a meterse en el argumento y a saber quién es quién se disfruta de lo lindo. El cine negro no es mi género preferido, pero lo cierto es que la elegancia que destila, y el irónico cinismo de los personajes dicen mucho del género humano.

Vi esta peli hace unos 4 años y acabo de descubrir que por fin he logrado olvidar ese pedazo truño que sólo alguien como Bigas luna, con experiencias previas comparables como "Bámbola", sería capaz de llevar a una sala de cine. Creo recordar que tras ver la peli pasé un par de semanas sin mirar a una pantalla, pero no termino de recordar si las ganas de vomitar fueron provocadas por lo absurdo del guión, por los patétitcos personajes o por las conversaciones cursi. En fin, si la tienes en DVD considera que te han vendido un posavasos un poquito caro.

He leído algunas de las críticas, de gente de la calle y de profesionales. Frases como "una comedia inteligente", o un "fiel retrato de la transición a la madurez" sólo consiguen plantearme serias dudas sobre la inteligencia o la madurez de algunos espectadores/críticos. La historia, aunque manida, podría haber dado algo de sí. Pero uno en seguida empieza a notar que algo falla en cuanto los personajes circenses hacen su aparición, y en la sala de cine los únicos movimientos de boca que se observan son prolongados y sonoros bostezos. No quiero dedicar demasiadas líneas a un proyecto que ya me robó 6 euros y 2 horas de mi tiempo, pero en fin, resumiendo: los personajes son auténtica bazofia y poco creibles, los protas son los que menos mal lo hacen y pese a todo aburren de lo lindo, la historia está mal contada, como comedia logra menos sonrisas que un velatorio y como tragedia afecta más o menos lo mismo que la muerte de una ameba (y eso que yo estoy en la misma edad), la dirección no logra salvar a la peli del desastre (bueno, parece que ganó el partido en los despacho, los canapés en el estreno debieron ser maravillosos, o tal vez se pagó unas cuantas copas ese finde, y ya de paso obligó a los críticos a escribir sus brillantes conclusiones en mitad de la borrachera). Aprovecho para pedir a la compañera (con todo el respeto) que solicitó que volviésemos a ver semejante bodrio para recpacitar, que trate de fomentar su sentido crítico, la autocomplacencia sólo nos llevará a (como decía otro compañero) seguir alimentando a rémoras como Bigas Luna, Vicente Aranda o (en esta ocasión) David Trueba... y yo sólo por esto que me han hecho me niego a ver cine Español durante 2 o 3 mesecitos.