Sin duda hay que elogiar el gran despliegue de medios usados para dar vida a esta serie llena de clichés Norte Americanos y rodada en exteriores a modo bucólico en unos preciosos parajes simulando el antiguo Oeste y que en esencia ese escenario es un parque de atracciones repleto de androides (anfitriones) que van guiando a los huéspedes por cientos de historias programadas por los informáticos de West World para que estos puedan sentir en una especie de realidad inmersiva como era la vida en aquellos tiempos y a la vez puedan matar y violar sin represalias, ni peligro real, ya que dichos anfitriones aunque pueden defenderse (con pistolas de juguete) para hacerlo más interesante, claramente, en principio no pueden matar a los humanos, aunque luego la historia se vaya complicando para los gerentes del parque que verán como sus criaturas "cobran vida" y deciden vengarse por todo el daño que han recibido por parte de los huéspedes en el parque.

Pues hay que felicitarlos ya que con un guión mediocre y demasiado enrevesado y profundo para lo reducido del escenario en sí, logran enganchar gracias a sus impresionantes tomas y gracias también a Ed Harris y a Anthony Hopkins que terminan de aportar calidad al producto con personajes brillantes llenos de personalidad, ideas locas y magnetismo que llenan la obra (eso sí, cada uno en su papel...).

Llamo a esta serie producto ya que no me resulta nada original. Soy consciente de la dificultad de crear una serie novedosa, cautivadora e inteligente pero resulta que me parece una copia intensiva aunque eso si, muy refinada, de Jurassic Park y de una de mis series favoritas que salió en 2012 llamada "Real Humans" de producción sueca, una serie de estupenda calidad tanto artística como narrativa del género androide en la cual estos se introducen en la vida diaria de las personas. Una gran trama de ciencia ficción y filosofía de la cual los Norte Americanos ya intentaron hacer una horrible y desafortunada (a mi parecer) adaptación titulada "Humans". Con West World el intento de copiar el formato de Real Humans es sin duda mucho más trabajoso e imaginativo, pero por desgracia no logra superar el enganche que me produjo dicha serie Sueca, que aún me tiene fascinada.
Seguramente debe de ser que tiendo hacia la horrible comparación.

Con todo ello también digo que la estoy viendo y que merece ser vista. Visualmente es muy atractiva y por lo menos aunque muy sutilmente entre tanto tiro y sangre falsa nos manda un mensaje para que tomemos conciencia sobre nuestra necesidad de violencia usando el "causa-efecto" de nuestras acciones sobre cualquier "creación".
¡Bienvenido vaquero!