Master of None es sin duda la gran sorpresa de la temporada de series y probablemente será la gran desconocida.

Si algo destaca en la serie de Aziz Ansari, es la sutileza. No es una comedia desternillante, no pasan demasiadas cosas hasta el punto de que a cierta gente le va a parecer una obra plana y sus personajes son interesantes sin necesidad de ser unos pirados insoportables.

Visualmente es sencilla, clásica y elegante. Todo en la serie nos aleja de lo pretencioso y a la vez de lo banal ( aprende Lena Durham)

En principio parce que carece de un hilo conductor, pero poco a poco este va a apareciendo dando sentido a toda la historia y la serie va creciendo. Los últimos capítulos son memorables, así que paciencia y a disfrutar,