Hola, soy una monja albina de ojos amarillos que acarrea con todo el peso de una franquicia. Mi nombre es Valak y estoy muy contenta por haberme adentrado en el mundo del cine. Todo empezó cuando me dieron el papel para un cameo en una tal "The Conjuring 2". No tuve que hacer mucho, mi cara lo decía todo. Gusté. Así que me dieron otro papelito en una peli de muñecas llamada Annabel 2. Hasta ahí muy bien. Mi carrera apuntaba alto y los mayores éxitos estaban aún por venir. Una mañana me levanté y recibí la gran noticia: Valak! Gritó mi representante. Lo has conseguido, vas a tener tu propia película. No podía creerlo. Di gracias a Satán por tan esperado regalo. Ninguna monja-actriz había llegado nunca tan lejos. Y como yo, millones de fans de esa franquicia enloquecieron con la noticia. No podía decepcionarlos. Así que practiqué y practiqué. Probaba cuánto podía abrir la boca enfrente del espejo. Estrangulaba gatos. Andaba cada día 20km arrastrando los pies en plan "joder, que ya viene". Incluso acudí a profesionales del metal moderno para perfeccionar mis sonidos guturales. Al final, devotos míos, y después de mucho esfuerzo, conseguimos terminar la película... y llegó el día del estreno. Muchos debotos fueron a ver mi peli... pero no les gustó. Ya se lo han cargado todo, decían. Y efectivamente.. aunque me cueste admitirlo, supongo que no estaba preparada para tener mi propia película. Acudí en busca de sabiduría, pues caí en una profunda depresión, y necesitaba pasar pagina. Mis días de gloria habían llegado a su fin. Lo acepté, porque soy una monja albina fuerte. Ahora merodeo por las calles, viviendo de noche y durmiendo de día y los fines de semana curro en un garito asustando a los turistas que aún sienten un poco de admiración hacia mi.

El hecho de disfrutar como un niño con una película de dragones es algo que aún tengo pendiente. Aunque esta se acercó mas que cualquier otra, tampoco lo acabé de lograr. El director Rob Bowman nos muestra solo un esbozo de lo que podría haber sido.

Las escenas de dragones gustan, no es un deleite, pero disfrutas. Lo demás son adornos, necesarios, pero mal llevados, que no acaban de funcionar. Un señor conservador, otro radical y una chica. Junto con otros supervivientes se centran en sobrevivir en un mundo arrasado por el fuego de los dragones (quizá hubiera estado mejor mostrar el durante, además del después de la destrucción). Y ahí acaba el argumento. Un duelo entre precavido y temerario constante, hasta dejar las diferencias a un lado y llegar al acuerdo y la chica de por medio intentando introducir ese forzado punto de amor y ternura en la historia... intentando.

En el momento de plantearse una película así deberían tomárselo más enserio. Aún no ser un bodrio monumental, no acaba de satisfacer a aquél que desea ver esta clase de películas. Más minutos enfocados desde otro punto de vista más brutal, más oscuro, más centrados en la lucha, la caída de los humanos y el cambio de poder, y el resultado hubiera sido uno con el que el público estaría satisfecho y yo podría haber tachado esa tarea de mi lista.

Desde la primera película “Batman Begins”, Christopher Nolan dejó claro que su intención no era hacer una simple película de superhéroes más. Y es a ahora, 7 años después, cuando hemos podido ver la culminación de la leyenda que ha logrado crear sobre el hombre murciélago. Con esta trilogía cinematográfica ha cambiado el cine de superhéroes para siempre y la forma de ver dicho cine por parte del espectador. Las historias de los demás superhéroes parecen ahora simples cuentos infantiles si las comparamos con el Batman de Christopher Nolan.

Esta tercera entrega, “El caballero oscuro: La leyenda renace”, no llega al nivel de su predecesora, “El caballero oscuro”, y era de esperar dado que la segunda parte de la saga dejó el listón muy alto. Aún así, una vez más logra sorprender al público con su brillantez y enganchándolo desde el primer instante y durante las casi 3 horas de duración de la película.

Las nuevas incorporaciones, Anne Hathaway, Tom Hardy, Marion Cotillard y Joseph Gordon-Levitt como Selina Kyle, Bane, Miranda Tate y John Blake respectivamente, dan la talla, el director ha conseguido hacerles formar parte de la leyenda y los actores han hecho un buen trabajo, callando de este modo a aquellos que cuestionaron a Nolan por contar con alguno de ellos.

Es así como Nolan pone punto y final a ésta trilogía regalando al espectador un desenlace épico y elevando el género de superhéroes a lo más alto.

Seth MacFarlen ha conseguido hacer de su primera película una comedia de las que hacía tiempo que esperábamos. Personalmente, no me reía tanto en el cine desde “Resacón en las Vegas” (la primera parte).

El hecho que el protagonista sea un oso de peluche no significa que sea un cuento para niños, ni mucho menos, la gracia esta en ver como un personaje que aparentemente es infantil y adorable, resulta ser todo lo contrario: un sinvergüenza de los pies a la cabeza. Si a eso le sumamos el gran doblaje de Santi Millán, conseguimos un personaje espectacular.

Mark Wahlberg también influye en este resultado. El hecho de verle normalmente como tipo duro, pegando tiros y puñetazos, hace que verlo en el papel de John Bennett, un calzonazos inmaduro, resulte muy gracioso. Además, se sale con su interpretación y consigue transmitir el humor al público.

La influencia de “Padre de familia” en la película es evidente. El humor y la puesta en escena que dan el toque distintivo y divertido a la serie han sido aprovechados por Seth MacFarlen y trasladados a la gran pantalla, dotando a “Ted” de una esencia diferente a las demás comedias.

Aunque el argumento flojea en alguna parte de la trama y algún personaje tiene un doblaje bastante malo, “Ted” logra llenar la sala de carcajadas, dando a los espectadores lo que han ido a buscar y por lo que han pagado su entrada: risas y una hora y media entretenida y divertida.

Si os fijáis veréis algún que otro guiño a ciertas películas famosas…

Parece ser que Hollywood se está quedando sin superhéroes que explotar. Bien podrían haberse gastado el pastizal invertido en esta película en hacer una cuarta entrega de la saga anterior, que seguramente no hubiera estado al nivel de las otras tres, como le paso a Piratas, pero antes que esto...

Para alguien que haya visto la anterior trilogía del trepa-muros le es imposible no comparar este nuevo Spider-Man con el anterior:
La puesta en escena de la nueva película es mucho más comercial, más moderna, el nuevo Spider-Man no parece en absoluto un empollón marginado, sino que más bien se asemeja al tío "guay", yendo por la vida con su skate (parece ser que ahora es mas aficionado a éste deporte que a la fotografía) y sus pintas molonas . Antes me quedo con Tobey Maguire, al que el papel de Peter Parker/Spider-Man le iba como anillo al dedo, y con cualquier otro villano de la saga... También se echa de menos la figura de Mary Jane y el humor de Jonah Jameson, ya que no aparecen en la película.
En la historia añaden cosas no contadas, y eso está bien, pero también cuentan cosas que ya pudimos ver en la otra versión, aunque lo hacen de un modo distinto. Ahí es donde está el problema, la idea básica que tenemos algunos sobre la historia de Spider-Man, influida por lo que vimos en las películas anteriores, queda destrozada.

Sin embargo la valoración que le he dado a la película es de un 6, dado que si la miramos desde el punto de vista de alguien que ha olvidado o no ha visto la trilogía anterior, es un film interesante. La historia no es increíble ni sorprendente, pero tampoco es un desastre, tiene unos buenos efectos especiales, grandes escenas de acción y un toque de humor que logra hacer reír en alguna escena. También es verdad que le sobran unos minutos, dado que se hace un tanto pesada en alguna parte de la trama.

Para mí, mucho más "Amazing" el Spider-Man anterior, pero bueno, vamos a ver qué harán con las siguientes partes, aunque, de todos modos, Spider-Man es un fenómeno mundial y hacer una película sobre él siempre supone muchos ingresos…