Haz click aquí para copiar la URL
España España · Burgos
Críticas de Dmon1987
1 2 3 >>
Críticas 14
Críticas ordenadas por utilidad
9
5 de agosto de 2010
17 de 20 usuarios han encontrado esta crítica útil
Christopher Nolan se ha propuesto rescatar al cine de una decadencia casi total y se está convirtiendo por méritos propios en uno de los directores más innovadores y originales de las últimas dos décadas. Y es que desde la revolución cinematográfica de los Wachowski y 'Matrix' no se había visto similar derroche de creatividad en un mundo en el que ni quedan ideas, ni saben desarrollarse salvo excepciones. 'Origen' es el delirio del celuloide, una ensoñación onírica sobre la condición humana y los instintos más primitivos en las sociedades más desarrolladas. Un ingenioso ejercicio que a primera vista puede parecer esclavo del entretenimiento pero dentro de su envoltorio fantasioso y trepidante nos introduce en una encrucijada que trata de explicar la base de la culpa, el remordimiento y el rencor.

Pero no sólo eso. Me atrevería a asegurar que 'Origen' le sirve a su director para entrar por méritos propios en Olimpo de los genios. Nolan no sólo se hace un hueco entre los artistas, eso sí, sin dejar de lado al entertainer que lleva dentro, sino que se sitúa a la altura de los dos únicos realizadores que consiguen que uno asista a sus metrajes sólo por que su nombre aparece en los créditos, es decir: Woody Allen y Scorsese, y esto son palabras mayores. En una industria que ha vuelto a la comercialización del rostro bello y el cuerpo hercúleo, pocos aciertan a sobrepasar las barreras del mainstream dotando a su cine de lo necesario para sobrevivir al paso del tiempo.

A partir de un guión que el director (o su hermano) tardó en escribir unos diez años, la acción se desarrolla con un ritmo propio del thriller más endiablado entre la realidad y el freudiano mundo de los sueños. Pero ojo, Nolan no quiere alardear de grandeza y sabe que el cine es de todos, y para todos. No tiene delirios de filósofo o pensador, no es innacesible como Lynch pero si cuenta con la suficiente inteligencia como para crear una historia muy enrevesada, pero tan hábilmente trenzada como si fuese un juego de niños. A todo lo anterior hay que añadirle un apartado visual realmente espectacular y una fotografía, por cortesía de Wally Pfister vertiginosa y de una belleza extasiante. El juego de cámaras lentas y efectos especiales que despliega Nolan permite apreciar en todo su esplendor el paraíso arquitectónico que el autor ha creado para tal ocasión.

Continúa sin desvelar partes de la película en el spoiler
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Dmon1987
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
6
29 de abril de 2010
16 de 18 usuarios han encontrado esta crítica útil
Fish Tank es una historia convencional. Similar muchas que, cada día, suceden en cualquier bajo fondo de los suburbios ingleses. Turbia y verosímil, con ese olor a barrio que destilan muchas de las obras británicas actuales. Cada resquicio, cada recoveco o calle despiden ese aroma a derrota y fracaso, que viene marcado en las frentes de los que han bajado los brazos, y sólo les queda esperar un golpe de suerte que nunca llega.

Andrea Arnold, como ya haría en su ópera prima, habla de lo que conoce. Se ampara en una fotografía oscura, como los personajes, y una banda sonora que oscila entre el rap y el R&B. Retrata, con mano firme, la problemática adolescente, a través de la actriz Katie Jarvis, barriobajera, esquiva y arisca, que se debate entre sus instintos autodestructivos y sus deseos de triunfar como bailarina. Todos los personajes llevan marcada, a fuego, la frustración, en lo más profundo de sus pechos. La madre, soltera, alcohólica y promiscua, las hijas conflictivas o el chatarrero desesperanzado, luchan por salir a flote en una jungla de asfalto que no da segundas oportunidades.

La película bebe del cine social británico. Tiene claras reminiscencias de Shane Meadows, director de la sublime This is England y la evocadora Sommers Town. Fish Tank es tierna y cruel, como Barrio, similar a Yo soy la Juani, pero bien hecha, sin estridencias. Acertada en la mayor parte de sus pasajes, la última media hora se hace pesada, incluso incomprensible. Algunas de las escenas chirrían considerablemente, y queda en la mente la idea de que, con veinte minutos menos, se hubiese convertido en un ejercicio de estilo profundo y contundente.

Destaca, por encima de los demás, la actriz protagonista. Navega entre peleas de barrio, travesuras, alcohol y lágrimas. Se muestra inaccesible, en principio, y sensible más tarde, pero siempre despojada de la inocencia necesaria en la pubertad. Su notable trabajo, ha sido merecedor de varias nominaciones, entre ellas, a la mejor actriz europea. Arnold la sacó de la nada, y en su debut se muestra natural y espontánea. El resto cumplen, sin más. A excepción de la hija pequeña, que pone la nota de humor cínico. Entre otros premios, hay que subrayar la consideración del público de Cannes como mejor película.

Es un film crítico, sin moraleja, demasiado cansino en ocasiones, pero atrevido, aunque no innovador. Quizá la historia de la adolescente desbocada, esté demasiado manida. Es posible que no sea una de esas películas que se recuerdan con el paso del tiempo, pero, al menos, nos mete de lleno en aquellos barrios en los que, los trozos de asfalto, las ventanas abiertas, las puertas entrecerradas y las habitaciones desvencijadas y marchitas, siempre tienen algo que contar.
Dmon1987
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
The Cove
Documental
Estados Unidos2009
7,9
10.644
Documental
7
10 de junio de 2010
7 de 7 usuarios han encontrado esta crítica útil
Puede que sea cierto que Una verdad incómoda, puso de moda la defensa del medioambiente, al menos en el cine. No es menos cierto, que hay más de un oportunista que aprovecha el tirón que supone, en la actualidad, la crítica a la contaminación, el cambio climático o los derechos de los animales. No siempre es por una causa solidaria, o mejor dicho, pura en su esencia, sino que puede utilizarse para mostrar al mundo una imagen verde, lejos de la realidad de cada uno, como ya sucedió con Al Gore, el hipócrita profeta del ecologismo.

The Cove es un documental reivindicativo. Quizá algo sentimental, exhaustivo en el planteamiento y con cierta dosis de misterio, extraña en este tipo de películas. Narra la cruzada de Rick O´Barry para salvar a los delfines. Él americano, es uno de tantos, entre los forajidos de buen corazón que quieren redimirse y dejar atrás de las épocas de tropelía y saqueo. Fue el domador de Flipper, el entrañable delfín, y lo vio morir en sus propios brazos.

Partiendo de esta premisa, rodada en Japón bajo la peligrosidad de las prohibiciones, comienza este proyecto. A través de una ingente cantidad de datos, y un despliegue técnico excepcional, el realizador Loui Psihoyos nos introduce lentamente en la bahía de Taiji, el principal matadero mundial de delfines. En ocasiones, el metraje toma tintes épicos, o incluso de novela de suspense –la infiltración en la cueva-. Otras veces, cae en lo excesivo, y ofrece más información de la que uno desearía, dejando a un lado lo realmente importante, el documento visual, único y exclusivo de la matanza.

Psihoyos fue fotógrafo de National Geographic, y eso se nota en su buen hacer, desde la planificación y el sistema organizativo, hasta el resultado final. Escoge a sus colaboradores con certeza, y termina ofreciendo un documento que, por desgracia, ha sido prohibido en el país del sol naciente, a pesar de las protestas. Resulta trágico e hiriente y, sobre todo en las partes en las que la acción prima sobre el diálogo, puede ser difícil de digerir para las sensibilidades más impresionables. Eso sí, lo anterior no debe llevarnos a engaño, The Cove, no camufla ni suaviza, sólo quiere mostrar, de manera realista, veraz y, porque no decirlo, arriesgada, uno de los ataques más cruentos del hombre sobre la fauna. El asesinato de la sonrisa del delfín.

La cinta ha sido merecedora del Oscar al mejor documental, y también obtuvo el premio del público en Sundance. Quizá no sirva para cambiar nada en un mundo dominado por la hipocresía, la doble moral, y los intereses económicos. Aún así, si consigue remover en el asiento a los presentes e incomodar a los altos cargos, algo ha ganado. La censura, siempre es un buen síntoma cuando se trata de ser revolucionario.
Dmon1987
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
3
7 de mayo de 2010
11 de 18 usuarios han encontrado esta crítica útil
Julio Medem, es, quizá junto con Almódovar, el gran auteur del cine español actual. No seré yo, quien niegue que, las películas del director donostiarra, siempre dejan, en la retina del espectador, una perspectiva única, personal e intransferible, sobre temas obsesivos como el amor y el sexo. También es cierto, que Medem es uno de los cineastas más aburridos y pretenciosos del cine actual. Bajo la larga sombra de Godard y la nouvelle vague, trata de elevar el cine a la categoría de arte, dotándole de un aire pseudo-transgresor que convirte sus películas en ensayos sobre la moral, la libertad y la represión de las pulsiones, en la mayoría de los casos, con resultados tediosos.

Habitación en Roma es un remake de En la cama, un film chileno de Matías Bizé. Solo que, en lugar de la relación entre dos heterosexuales en una aventura eventual, Medem se desmarca y, ya sea por amor al morbo, o como estudio sociológico de las reacciones humanas, decide sustituirlo por un encuentro lésbico. Es cierto que la primera media hora, sorprenden los desnudos integrales y las escenas eróticas, pero, después de un rato, la película se convierte en una nimiedad elevada al cubo, un desfile impúdico de mujeres en pelotas y sexo más o menos explícito. Crear polémica con objeto de promocionar un producto, no es lo mismo que hacerlo con la intención de remover los estómagos de los espectadores. Y, Medem, al contrario que Peckinpah o Kubrik, narradores de lo instintos humanos, sucios y repulsivos, está entre los vendedores de humo. Usa lo explícito con el único objetivo de recrearse, sin dar lugar a la imaginación.

Quizá haya que destacar el esfuerzo de las actrices por dignificar la película, sobre todo, el de una Elena Anaya sorprendente y cautivadora. Natasha Yarovenko, también resulta convincente en su papel. Sin embargo, sus interpretaciones se ven desmerecidas entre diálogos cursis y momentos en los que prima lo remilgado, e incluso, la vergüenza ajena. El guión parece escrito a vuela pluma, la mayoría de las escenas se ahogan en el falso romanticismo, y uno no deja de preguntarse qué sentido tiene rodar una película en Roma, en la que sólo hay dos escenas fuera del hotel.

En algunas ocasiones, uno se deja seducir por la belleza bucólica de los planos, la calidez del montaje o la suavidad de la fotografía. No obstante, al final todo huele a estafa con ínfulas poéticas. Queda la sensación de que el conjunto es vano, y la insustancialidad lo abarca todo. El excelente trabajo del Medem director, queda deslucido por sus nefastas cualidades como contador de historias, algo que ya le pasó, por ejemplo, en Lucía y el sexo.

Sigue en el spolier:
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Dmon1987
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
7
11 de abril de 2010
8 de 13 usuarios han encontrado esta crítica útil
En muchas ocasiones, es complicado dilucidar la diferencia entre un film casposo de sábado por la tarde, o un drama realmente serio y convincente que no busque la lágrima sencilla ni el sentimentalismo barato. En Sólo ellos, la diferencia la marca, sin duda alguna, Clive Owen. El australiano es un buen actor, sensible, con gran cantidad de matices y de aquellos que siempre hacen que la película merezca la pena por su presencia. Sin embargo, la mayoría de las veces, ha optado por papeles de acción que lo han catalogado como tipo duro, de rostro impasible, siempre impertérrito. De Sin City a Plan Oculto, pasando por Sin Control o Shoot´Em up, sólo Hijos de los hombres, o Closer, nos han permitido explorar su faceta más íntima, la del drama desgarrador, sin efectismos.

Sólo ellos tiene un argumento quizá trillado: el del padre viudo que tiene que hacerse cargo de sus hijos. La mujer de Joe Warr (Owen) muere de cáncer, lo cual da pie a una nueva relación entre el periodista deportivo y su hijo Artie. Por si fuera poco, también Harry, su hijo de una relación anterior, se muda a Australia para vivir con él. Hasta ahí, todo muy típico y convencional. Aún así, la película sorprende y resulta desgarradora y cruel. Habla de la pérdida y el dolor. De las dificultades de emprender una nueva vida, con responsabilidades renovadas, de cómo Joe trata de ser el faro que guíe a sus hijos pero se encuentra con la impotencia del que nunca tuvo que ejercer de padre.

Scott Hicks es un experto director de dramas. Quizá en ocasiones caiga en la ñoñez, incluso en lo insípido, pero, en esta ocasión ha sabido dar con la tecla. Ha encontrado el equilibrio necesario. Sólo ellos, introduce también el tema de la familia moderna. Joe Warr, divorciado y poco después viudo, trata de rehacer su vida cuando aparece otra mujer. La incomprensión de sus hijos es patente. Su frustración le hace mirar a la cámara de forma desconsolada. Sufre y padece la injusticia de la pérdida, pero siempre en silencio.

La película acaba convirtiéndose en un ejercicio catártico para todo el que haya pasado por una experiencia similar. Aunque no sé, hasta que punto, es recomendable ir al cine y encontrarse con una historia que te mantiene durante hora y media tratando de evitar que las lágrimas caigan por tus mejillas. Si te quieres distraer, sin pensar en nada, mejor será que veas algo insulso, con muchos golpes y efectos especiales. Y si puede ser en 3D, mucho mejor, que es lo que se lleva.
Dmon1987
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
1 2 3 >>
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow