Recién salido de la sala de cine.

El libro me gustó mucho e iba ilusionado, y la verdad es que no me ha decepcionado. Tiene imágenes poderosas, referencias interesantes al libro y la calificación por edades no la he notado. La acción es constante y no satura gracias a lo variado de las situaciones. Algo que no me esperaba es que le quedara tan bien el tomarse en serio. El viajecito que se marca Pitt es tremendo y coherente. Sus etapas me han parecido apasionantes, en particular las de Israel y Cardiff, que pasan de un formato a otro de forma muy natural.

Vamos, que Guerra Mundial Z BIEN. Y sin embargo, una lástima.

Aquí había dinero, señores. Pasta gansa. Me ha dado la sensación de que efectivamente la película iba a parecerse mucho más al libro de lo que se ha parecido finalmente por un cambio poco deseado por la mayoría de gente presente en el proyecto. Vamos, que ha habido un señor con mucho poder que ha pegado un par de palmadas en la mesa para cambiarlo todo, no vaya a ser que a la gente no le guste. Creo que aquí reside la mayor virtud del film. Es un producto que ha sufrido mucho y ha resultado ser muy potable.

La estrella aquí es Brad Pitt. Corre, salta, pelea y en general figura estupendamente. Sorprende la sobriedad que muestra en todo momento. Tenía pavor por la familia de éste, porque nos los tuviéramos que tragar durante toda la película, pero quedan apartados muy elegantemente sin que lleguen a desentonar. Los extras tampoco están nada mal y me ha sorprendido muy mucho ver a Peter Capaldi, que vaya pedazo de actor que está hecho.

Lo peor que le he visto quizás han sido algunas escenas de acción con cámara al hombro, un poco mareante todo supongo que para dar sensación de caos. Pero por lo demás, momentos que podrían haber quedado horribles y forzados, aquí salen sorprendentemente airosos. La mini-entrevista con el agente de la CIA es lo suficientemente informativa como para no sobrar. El chaval brasileño sale lo justo para no parecer ridículo que se haya adaptado tan bien a la situación. La llamada de teléfono en el infierno también me ha parecido natural y nada oportunista.

En resumen, creo que es estupenda salvando las distancias con el libro, el mejor blockbuster de lo que llevamos de año junto con Man of Steel.

Nota adicional referente al libro: quizás hubiera sido mejor ser algo más fiel a la novela original, pero también quizás hubiera sido mucho peor. De hecho, la novela original la vería inadaptable sin recurrir al formato documental, que hubiera sido fatal para la taquilla. Porque seamos sinceros, una película con Brad Pitt entrevistando a personas por el mundo con 4 o 5 flashbacks medio-largos de por medio correría el riesgo de empachar muy fuerte a la peña.

Brave es la historia de Merida, princesa de profesión, que ya está hasta los ovarios de su madre, la reina, por querer ésta organizarle la vida y decirle cómo debe comportarse. La guinda viene cuando toca casarse como toda buena princesa, y ello desemboca en una trifulca madre-hija que culminará en cabreo monumental y claro caso de "cuidado con lo que deseas..." que le llevará a conocerse un poco más a si misma y a la sociedad en la que vive. Para contarte esto, se sirve de los parajes de la Escocia medieval y la técnica sobresaliente a la que Pixar nos tienen acostumbrados.

El argumento es a simple vista facilón y sin mucho gancho, pero está muy bien resuelto usando recursos la mar de apañados que no caen (o no terminan de caer) en ese "lo de siempre" que a menudo resulta tan rancio. Si además lo aderezas con algunos gags bien construidos, pues oye, stupendams.

En todo caso, la película es la historia del adolescente rebelde, de cuándo por primera vez nos sentimos capaces de combatir nuestro destino y cambiar algo por nosotros mismos, y quizás nos encontremos con cierta resistencia que debamos combatir porque "sentimos" que debemos hacerlo. A la vez es un buen ejemplo de unos autores que, con tremenda pasión, se implican por completo en el material que tienen. Y lo hacen porque, joder, confían en él. Y no hay nada más satisfactorio para un servidor que palpar parte de esa pasión durante algo más de hora y media.

Por último, expondré una interpretación personal: remontémonos a la carrera por los oscars de 2011. Uno de los implicados en Toy Story 3 dijo que si su película era la mejor valorada del año, no intentar ganar el premio sería una error. Estas declaraciones ponen de manifiesto que por una vez, Pixar quería un reconocimiento de la academia a su labor, aunque finalmente no lo consiguieron. Esto pudo llevar al estudio a plantearse seriamente el realizar películas más comerciales y menos personales para así llevarse la tan codiciada estatuilla dorada y aceptar un destino que a todas luces no querían. ¿Hay algo de todo ésto en Brave?, yo desde luego creo que si.

Esto no es una crítica, porque sencillamente no puedo hablar con frialdad sobre algo como ésto, que me toca tan de cerca. Una crítica formal sobre esta película es como hacerla de aquel vídeo donde mi padre me grabó jugando con los G.I.Joe´s con un bocadillo de Nocilla en la mano.

Solo puedo decir lo siguiente.

Gracias a todos los que han hecho posible esta película por recordarme que una vez existió algo más grande que los dinosaurios. Con nostalgia, con salero, con CHUCK, mucho ritmo, liturgia, frases míticas (Míticas, con mayúsculas).

Un diez a Van Damme, a Lundgren, a Chuache, a Statham... Un diez a todos, qué cojones. Ídolos, los mejores, me han hecho llorar y vomitar de plena felicidad, igual que a todos los que crecimos con Jungla de Cristal, Depredador, Terminator o Rocky.

Porque todos nos conocemos en silencio.

Mil gracias. Os quiero.

Los prejuicios son malos, terribles. Juzgar algo sin entenderlo es probablemente de las peores cosas que puede hacer un ser humano. Con Drive, me pasó eso. La veía desde fuera como una gafapastada de esas que están tan de moda ahora, y me imaginaba a Ryan Gosling y Ron Perlman bailando en silencio con un coro de gente vestida de payasos intentando expresar algo que yo que se. Cine de género, lo llaman. O pulp, o de autor, qué se yo, solo soy un tipo curioso con ganas de ver cine que no me tome por idiota.

El caso es que lo que encontré fue un leve susurro, una suave brisa por la que Winding Refn (el director de la cinta, totalmente desconocido por mi persona) pretende hacer al espectador entender lo que está contando. No sabes del todo qué está pasando, pero con las miradas, las sonrisas, los silencios o los comentarios banales que emiten los personajes, sabes que ahí hay algo que puede trascender, que importa de verdad. Mención aparte merecen los primeros planos largos que te mantienen en tensión, esperando algo que desconoces pero sabes que es muy posible que llegue.

Veo 'Drive' como una peli que intenta que el "qué se cuenta" esté al servicio del "cómo se cuenta", y no al revés. Mediante la forma puedes lograr un fondo. ¿Y sabeis qué?, cada vez me voy dando más cuenta de que lo que de verdad importa es más simple que el mecanismo de un botijo, pero muy complejo en su ejecución. La historia de cómo un tipo solitario que sobrevive como puede se enamora de una princesa casada con un tipo de dudosa valía, no es sino lo mismo de siempre. La eterna lucha del ser luminoso por proteger lo poco bueno que queda en el mundo antes de que el mal arrase con todo. Pero la auténtica belleza, lo sustancial, depende casi en su totalidad de los mecanismos que uses para contarla e ir con ellos a muerte.

Y este Refn empotra esos mecanismos contra el armario y los pone mirando a Narnia durante una hora y cuarenta minutos.

Peña, estamos hablando de un tio que cuando se cabrea se convierte en una mole gigante verde. Si quereis duelos mentales y conflictos existenciales, ésta no es vuestra peli. A mí la de Lee me resultó tediosa hasta el infinito, pero con ésta no he mirado el reloj ni una sola vez.

Se nota que la dirección sabe aprovechar a un grande como Norton, que pone ese toque tan "filosófico" -por llamarlo de alguna forma- al personaje más burro de la Marvel. De hecho, creo que su expresividad es muy similar a la de Kevin Spacey, da más a entender por su forma de actuar que por el aspecto de su cara. La escena de la persecución en las fabelas, que por cierto está cojonudamente rodada, nos da a entender que tal vez su falta de expresividad facial es a causa de su intento desesperado de no perder el control.

Liv Tyler y Will Hurt van justitos. Pienso que Tyler no está a la altura que se le plantea a su personaje, y no sabe por donde agarrar el papel de "científica coqueta novia de gigante radiactivo", y Hurt hace lo que puede en el papel de jefazo militar sin ética. Sin embargo, a mi Tim Roth me parece soberbio en su rol de malo maloso, estando posiblemente en la lista de suplentes para hacer de psicópata cabrón, y el tio se lo pasa pipa, que es de agradecer en este tipo de cine.

Todo culmina con una señora pelea entre titanes donde la tecnólogía se pone al servicio de la simple y pura hostia, zurciendose los lomos a saco y saltando por la ciudad. A mi me pareció un broche genial. En una peli de superheroes ésto es necesario, maldita sea.

Lo dicho, cine de entretenimiento 100%. Vedla en HD, a ser posible.