Citizen Kane cambió la forma de hacer cine, me parece que innovó el lenguaje de las imágenes en movimiento, por que como lo noté, Welles jugó bastante con los efectos de cámara, que por cierto tiene muchos, trabajó muy bien los ángulos, fue majestuosa la profundidad de campo, los encuadres, el equilibrio o donde recae el peso visual dentro del cuadro, sino hubiese sabido que esta película se estrenó a principios de los 40’s me hubiese ido convencida de que es más nueva de lo que parece y esto es hablando únicamente de tecnicismos, por que la historia de Charles Foster Kane, el personaje principal, es muy enriquecedora en cuanto a valores, ya que es todo un seguimiento de su vida a modo de flashbacks ajenos a él, aunando su crecimiento como individuo y su evolución psicológica. De esta manera y tomando en cuenta lo anterior, segmentaría la historia en tres actos:
El primero marcado por la inocencia de un pequeño Kane inquieto como cualquier niño, pero aun así vemos como por vez primera experimenta el temor, la incertidumbre incluso, cuando no puede comprender la decisión que tomaban sus padres por el bienestar de su futuro. Un abandono al final de cuentas y un drástico giro en su formación.
En el siguiente acto nos encontramos con una sobrecarga de energía de un Kane joven, de un niño exitoso tomando el control de un periódico que es leído por todo Estados Unidos y todavía así seguimos notando la inocencia de sus primeros años y que, además, podemos presumir la magnitud de la humildad con la que se crea una presencia para hacer cambios o creer que hará cambios en el entorno.
Por último, el lente capta a un viejo millonario que es reconocido donde quiera que vaya, y no nada más en el ámbito periodístico es una celebridad, sino también en el del entretenimiento, pero está cansado de eso, pareciera que ha perdido su esencia optimista, está asqueado por que ya conoció el mundo y ahora le harta, ya no hay inocencia ni humildad pero tiene una pequeña obsesión, coleccionar esculturas, las compra todas inclusive a las vivientes, cayendo en el materialismo por que intenta mantenerlas junto a él sin darse cuenta que las trata como objetos. Y es así como las personas comienzan a alejarse quedándole sólo sus sirvientes.

“Asuntos privados en lugares públicos” es una película que tiene como tema central tratar de explicar desde distintos puntos de vista la soledad humana en personas mayores que actúan inmaduramente, quizás “inmaduramente” puesto que la soledad en una edad avanzada donde el individuo se niega a aceptarla y teniendo en cuenta que el individuo en cuestión aún tiene fe en terminar encontrando a esa persona con la que compartir el resto de su vida, conlleva en ocasiones a perder la paciencia y caer en la desesperación dentro de su búsqueda. La historia no gira en torno a uno o dos personajes en específico, sino a varios que no tienen nada en común, donde sus vidas poco a poco se van entrelazándose entre ellos mismos.
“Asuntos privados en lugares públicos” es una historia con tintes cómicos y en ocasiones algo sarcásticos, está bien hecha aunque en un principio expone de una manera rápida y poco explicativa a todos sus personajes, aun así conforme va avanzando la historia se va develando las intenciones y cualidades de cada uno; algo más que noté, fue la cantidad de simbolismos dentro de la película que, en un orden poético, se tiene la secuencia de imágenes poniendo a cuadro a distintos objetos de alguna habitación, de esta manera se podía entender cuál era el problema, conflicto o tema presentado en esa escena.
Es poco lo que conozco de Resnais, pero sí algo observé con los movimientos de cámara, fue que en ocasiones utiliza el zoom, siendo esto por estética, casi no utilizado en un film.