Conociendo de cerca la enfermedad me crucé con esta cinta; tenía mucha curiosidad por ser un tema tan tabú y la cogí con ganas. Empieza floja y crees que en algún momento subirá, pero no. Plano cual encefalograma postmortem.

No pierdas el tiempo, es irreal. Falta de emociones, sin amor ni odio, ni siquiera un guión decente, tan solo pinceladas de brocha gorda para hacer de lo que sería un corto curioso a un largometraje infumable. O cómo hacer una hamburguesa vegana desde la carne de un cerdo.