Poco que decir de esta película, una de tantas, un inicio con cierto potencial que se va diluyendo conforme pasan los minutos, hasta que llega el momento que sabes que va a pasar y como, que puede ser en el minuto 15, predecible y aún así le das la oportunidad pensando que Kevin Smith con sus bufonadas arreglara un poco el bodrio, pero no es así, aún así hay que reconocer que se consigue ver entera aunque en ningún momento te llegue a calar o decir algo.

Garner no hace ninguna maravilla, y la química entre ella y Olyphant es completamente nula, el resto de personajes son meros acompañantes de la comparsa, y cuando termina la película te queda la sensación de que con ese guión, podría haber estado mejor, porque puede que la historia sea lo mas típico del mundo, pero si quien la interpreta no acompaña no hay nada que hacer y no puedes salvar ningún resto de este naufragio.

Enamorado me tiene la forma de narración de esta película, dos historias separadas por el antes y el después de una estancia en la cárcel, un Edward Norton soberbio reflejando consecuencias del odio y el racismo de la sociedad americana, una historia y un reparto que giran y evolucionan alrededor suyo.

Como ya hemos dicho tenemos dos historias, antes y después de prisión que van intercalándose a lo largo de la película, un antes en blanco y negro y un después ya en color, esto añadido al plus por la fotografía consigue un efecto perfecto.

En conjunto tenemos una muy recomendada película, que ademas cuenta una historia interesante con un añadido de no ocultar ni suavizar nada demasiado, no es agradable en algunas ocasiones, pero tampoco lo necesita y es que el odio solo engendra odio.

Sencillamente una buena, o incluso en algunos momentos más que notable película, aunque no tan buena adaptación quizás, pero esto es un mal muy común, pero quien no disfrute de ella por ello eso que se pierde.

Con un reparto más que aceptable, Greoffrey Rush esta inmenso a mi parecer e incluso Uma Thurman a pesar de su "escaso" papel consigue impactar y luego alguien como Liam Neeson que siempre aporta fiabilidad no puede salir nada malo, y eso es lo que tenemos una película que nos narra la huida de su pasado de un personaje, el dilema la justicia según las leyes de la época... todo rodeado de una fotografía y ambientación esplendida.

Puede que no sea una película que marcara época y se encuentre algo perdida hoy día, pero sin lugar a dudas merece ser vista.

Adaptación de la obra de Lucía Etxeberría, no hay mucho que decir en mi opinión, así que siendo claro tenemos un intento de llevar el libro y toda su esencia a la pantalla tal cual, el problema con que se encuentra es que no ves un hilo entre escena y escena, así que estamos ante una colección de flash, o sketch o como quieras llamarlo, y aún así me resultó interesante, y es que los diálogos de Etxeberría están aquí y con eso puedes salvar una tarde de película.

El reparto de actores es a priori interesante aunque en mi opinión fallido, aunque haber apostado por gente desconocida y más joven pudiera haber resultado un riesgo para la productora creo que, como todo el mundo, es mejor buscar a alguien que encaje en el papel a malintentar que un papel encaje en alguien.

Y a pesar de todo me resultó interesante.

Aquí tenemos una historia de amor por etapas: infancia, adolescencia y madurez, marcada por las casualidades, demasiadas para algunos, la historia de amor entre Otto y Ana. No se trata de una historia feliz, sino más bien es una historia de tristeza y melancolía aunque a fin de cuentas una bonita historia.

Está narrada en dos perspectivas, ya que los dos protagonistas principales van intercambiando la narración y ofreciéndonos sus diferentes perspectivas de la relación entre ellos y su vida, desde el tierno cariño o primer amor de juventud hasta algo más maduro.

La fotografía, los tiempos, la narración, escenarios, diálogos, etc. invitan a una melancolía demasiado remarcada quizás, aunque esto hace que la película sea más envolvente, disfrutas viéndola en todo momento.

Es necesario que la vida tenga sus ciclos.