Esta serie es una de las mejores series que se han realizado jamás para televisión. El papel de Carradine es perfecto y las situaciones de cada capítulo le van haciendo crecer día a día como persona, a su vez, va creciendo su carisma gracias a su forma de ser y por su afán de cumplir sus ideales y todo lo que ha aprendido.

Los flashbacks son magistrales y entre frases, moralejas y circunstancias de cada uno de ellos, se enseñan verdaderos valores y verdades de la vida diaria. Esta serie la pueden ver niños, jóvenes, mayores y ancianos, pues cualquiera aprenderá muchos cosas en ella.

La serie es más espiritual, pedagógica y sabia que marcial y física, y yo lo celebro.
Si Bruce Lee la hubiera protagonizado se hubiera perdido todo el mensaje y todas las enseñanzas que nos ofrece, a pesar de que Bruce era un gran filosofo, sus películas solo nos mostraban lucha por los cuatro costados, en esta serie se enseña a mediar y se enseña que la pelea debe ser la última de las opciones, algo verdadero y que muestra al autentico ser. Bruce solucionaba todo peleando y no me imagino a Bruce siendo atado o empujado capítulo sí, capítulo no sin hacer nada.
Lo que sí es cierto es que el nombre de la serie podía haber sido modificado cuando eligieron a Carradine, pues realmente comparto que el titulo no se corresponde con la filosofía de esta serie.

Las respuestas de los maestros, además de ingeniosas, brillantes y profundas, siempre eran acompañadas de metáforas o moralejas y siempre dejaban una reflexión para Caine.

Dice alguno que la serie era muy repetitiva, que ves un capítulo y has visto todos... pero eso incluso hoy día, ocurre con las series que conocemos (CSI, el Mentalista, BONES, Hospital, SIN RASTRO, y mejor no seguir por que la lista es interminable...), sin embargo de toda situación se aprende una nueva vivencia y esto ocurre hasta con las series actuales, pese a que no tienen un mensaje tan profundo como la serie de la que hablamos.

En definitiva es una serie muy bien producida, con una idea original y una gran fotografía, en las cuales se pueden visionar grandes y hermosos parajes, mención especial también a los vestuarios y pueblos de la época en el Oeste.