Quien quiera pasarse un rato viendo muestras de ello pues aquí está su película. Más que realista es cotidiana, es como si se cogieran a unas cuantas personas de la calle al azar, con el requisito de que tengan algún tipo de problema, y se filmase su vida durante unas semanas. Desde luego que el film está muy bien hecho y muy bien interpretado, lo único malo que le veo es que por más que sean historias de la vida misma, y por muy de la vida misma que sean, no sirven para motivar al espectador de ninguna manera, sino para recordarle que por desgracia la vida está plagada de situaciones difíciles, y para eso el ciudadano de a pie que viva el día a día no necesita ver una película de estas, porque se patea la calle a diario, lee los periódicos, ve el telediario etc, etc. La verdad, bajo mi humilde opinión pienso que la mayoría de nosotros no vive en un mundo de rosas presisamente, y por ello no considero que para aquellos que quieren desconectar de los problemas sea positivo ver películas de este tipo sino todo lo contrario, aquellas que nos ayuden un poco a olvidar las difíciles situaciones que existen en el mundo en el que vivimos.

Me ha gustado mucho también esta segunda entrega de Wyrmwood, película de zombis que al parecer no es muy conocida y que en mi opinión no tiene mucho que envidiar a otras películas del género que incluso se las considera de culto. Ya en la primera parte, La Carretera de los Muertos, la mano de Kiah Roache-Turner mostró su habilidad y desparpajo con una manera de dirigir fresca y gamberra con un resultado muy potente a la vez que divertido, y en ésta vuelve a repetir fórmula sin que el resultado decaiga en enteros, cosa difícil de conseguir en segundas partes. En resumen es una sangrienta matanza de zombis con muchísima acción y un ritmo que no decae en ningún momento, con ideas frescas e interesantes, escenas trepidantes y que además tiene buenos golpes de humor. Qué mas se puede pedir...
... La tercera parte.

Empezando por lo final que es lo que más me ha gustado, pero sin contar nada, termina con bastante intensidad y emoción, y con muy buenos y conseguidos escenarios, dado que el tema de las imágenes y los efectos especiales está bastante bien currado, así que en estos aspectos la película es de nota más que aceptable, y con un desenlace que va in crescendo a medida que se acerca el final que es como digo lo que mas me gusta de las películas. Y terminando por el principio, comienza con un tema un poco raro pero diferente y que además resulta bastante curioso, aunque hay momentos en los que se pierde un poco el interés, en la mitad más o menos sobre todo, en general entretiene aceptablemente bien.

Olvídense de la espectacularidad de las peleas y la acción de las anteriores, nada que ver con eso, han apostado por meter la acción muchos grados bajo cero y aquí hasta eso se congela, todo rodeado de nieve y paisajes blancos al estilo de las películas nórdicas, cosa que para mi gusto no ha cuajado en absoluto y me ha dejado bastante defraudado.

Muy bien los primeros veinticinco minutos de película, film serio, directo y sin rodeos, como me encantan, pero de buenas a primeras aparecen un par de protagonistas totalmente inesperados que cambian por completo toda la trama, y todo lo que estaba bien desaparece, se disuelve en una aventurilla con muy poco sentido con la que el director termina con el film bélico y da paso a una penosa historieta de papá canguro.